Cuarta corrida del ciclo, en el cartel un encierro de El Puerto de San Lorenzo y uno de La Ventana del Puerto (6º), que debuta en San Fermín, para la terna: Curro Díaz, Paco Ureña y José Garrido.

Abría plaza un toro cinqueño, serio, gordo. De salida fría, desentendiéndose de capotes dando varias vueltas al ruedo. Dos puyazos traseros sin empujar y dejándose pegar. En el primer par, Pablo Saugar «Pirri» sufrió una fea cogida en el bajo vientre. Tercio en el que el toro dio complicaciones a los subalternos. Tratando de echar siempre la muleta al hocico y de ligarle los muletazos pero era muy complicado por la condición del burel, sin recorrido y defendiéndose. Ejecutó muletazos limpios y tras el fallo a espadas fue ovacionado.

El segundo con menos kilos, veleto, con pitones blancos. Se gustó Paco Ureña con un recibo a la verónica rematado con una media. En la primera vara derribó al caballo, en el segundo se le midió la fuerza. Vistoso quite de José Garrido antes de un tercio de banderillas en el que el burel cumplió. Comenzó la faena con unos comprometidos estatutarios. Continuó la faena con series de derechazos en las que el animal, que pedía distancias, humilló. Más complicado por el pitón izquierdo. Cuando redujo los terrenos, bajó la intensidad de la faena. El toro, con casa repetía con alegría y cierto picante, a veces algo molesto. Culminó enterrando los aceros para que el público le pidiera la oreja que fue concedida por el presidente.

El tercero un toro más alto, cinqueño, con hechuras típicas de la ganadería. Lo recibió con dos largas cambiadas de rodillas, el cornúpeta desentendido del capote. Tomo dos varas, una en cada caballo. Acusaba mansedumbre y querencia a la puerta del encierro. El tercio de banderillas también condicionado por las intenciones del toro. Brindó al público José Garrido. Lo recibió con unos doblones por abajo en los medios para ponerse con una tanda de derechazos en la que perdió las manos en repetidas ocasiones. Con embestidas descompuestas, embistiendo por dentro y dando cabezazos, Garrido solventó con oficio ante la imposibilidad del animal. A la hora de entrar a matar el toro se defendía. Tras tres intentos con los aceros y dos con el estoque de cruceta finalizó la lidia.

El cuarto en salir al ruedo, un toro gordo, con más caja. Tomó dos puyazos empujando. Quitó por verónicas Ureña rematando con una media. Cumplió en banderillas. Comenzó la faena de muleta con un inicio muy personal, el toro quizás quedó algo mermado tras un golpe contra las tablas. Tandas de muletazos sin interés, con un toro que no ayudó nada y se puso complicado en la suerte suprema. Entre el alboroto de las peñas y la merienda, un toro que pasó desapercibido en el tendido, sin trasmitir la dureza que presentaba.

El quinto, muy abierto de cara, alto, bastote de hechuras apenas se dejó torear de capote. Derribó el caballo en el primer encuentro y en el segundo el picador salió desprendido por los aires cayendo de aparatosa manera. El murciano trasteó sin opciones a un toro que embestía de manera bruta, arreando sin humillar. Decidió abreviar ante la imposibilidad del animal.

El cierraplaza, «Huracán» de la Ventana del Puerto, segundo hierro de la casa, que fue el que protagonizó la rapidísima carrera en el encierro de por la mañana. Toro castaño, alto, bien hecho. Saludo capotero por delantales. Tomo dos varas. Quitó con gusto el pacense por verónicas. En banderillas cumplió apurando hasta tablas. De rodillas recibió Garrido con la muleta. Tandas con gusto y trasmisión al tendido. El toro tuvo calidad y nobleza aunque algo falto de fuerzas. Mató de pinchazo y estocada y cortó un apéndice.

VI de Abono de la Feria del Toro 2017, Plaza de Toros de Pamplona: Toros de El Puerto de San Lorenzo y La Ventana del Puerto (6º), para: Curro Díaz: ovación y silencio; Paco Ureña: oreja y silencio; y José Garrido: silencio y oreja. Entrada: Lleno.

PARTE MÉDICO DE PABLO SAUGAR «PIRRI».- «Herida por asta de toro con disección de uretra y evisceración intestinal, rotura completa de pared abdominal y múltiples perforaciones intestinales. Se ha procedido a realizar resección intestinal y reparación de las lesiones intestinales más pequeñas. Múltiples lavados. Reparación de pared. Además presenta múltiples heridas perforantes en labio que se suturan. Pronóstico grave. Ingresado en URPA de Hospital de CHN. Firmado: Ángel M. Hidalgo, cirujano jefe de la plaza de toros de Pamplona».

 

Por Mario Santos