Doña María Jesús Bueno Bueno es la quinta generación de una larga saga de ganaderos. En ella recae el sentimiento de mantener una ganadería y un encaste. Una tradición que ella eligió por vocación, por amor y compromiso a la tauromaquia. Con una afición desmedida y con las ideas claras, la ganadera de “El Añadio” quiere volver a llevar a su encaste a los viejos hitos de antaño.

Una ganadería con personalidad propia, con un origen histórico donde adquieren directamente y sin intermediarios al Conde de Santa Coloma, su línea es muy definida, “Coquilla”. Algo que hace a esta ganadería ser uno de los últimos paraísos para este encaste tan maltratado por el circuito de las grandes ferias. Algo único en la cabaña brava actual, que ilusiona a cualquier aficionado al saber que existen todavía ganaderos románticos que apuestan por la tradición.

A veces el sistema, deliberadamente, deja de atender o atiende de forma deficiente ciertos encastes minoritarios, aunque alberguen una fuente inagotable de bravura, por su exigente selección. Es muy importante para Doña María Jesús los criterios de búsqueda y selección en sus tentaderos, dando una gran importancia al caballo, donde el galope, la fijación y la alegría tienen que ser en alto grado, el animal tiene que demostrar bravura en el penco de forma constante. Una ganadera diferente criada en un mundo de hombres, pero con una visión casi clarividente donde nunca busca la monotonía en la faena y quiere imprimir mucha raza a sus reses, tildando el ritmo, la clase, la codicia, la exigencia y siempre a mas como algo necesario en sus vacas de vientre y sementales.

Hace 18 años que intenta imprimir esos criterios en sus reses, teniendo estas famas de bravas y alegres, aptas para los aficionados más puristas. El pequeño paraíso en la provincia de Jaén a base del encaste Coquilla, el encaste Buendía es un sueño para todo aquel que ame el encaste minoritario. En sus principios todo iba por separado, pero empezó a mezclar alguna cosa entre las dos ramas del Santa Coloma obteniendo muy buenos resultados. El mismísimo José Chafik  romántico ganadero mexicano y un genio de la genética estuvo muy ilusionado con esta ganadería prestando su ayuda, incluso algún semental por la via de Santa Coloma de Paco Camino. En ese tiempo nuestra protagonista aprendió mucho, tanto de genética como de selección, algo que recordará toda la vida.

Esta temporada ha lidiado con gran éxito en Jaén, Navas de San Juan y Castellar, obteniendo varias vueltas al ruedo y ovaciones en el arrastre.  La bravura de los “Coquilla” del Añadio no pasa desapercibido entre el público, quedando grabado en la retina la codicia, lucha y entrega de unos novillos, que en ocasiones merecen otras muñecas para ser lidiados. Con una camada corta, debido a la problemática actual del mercado, que demanda kilos y no bravura. La temporada que viene podremos disfrutar de 2 novilladas picadas, 3 novilladas sin caballos y algún toro suelto que sería ideal que fuera algún concurso interesante en Francia.

Trabajo, sacrificio, ilusión, esfuerzo y una gran afición hacen de esta ganadera un ejemplo para todos aquellos que amamos con locura esta afición. Donde la integridad está por encima del burdo mercado, y la bravura como adjetivo positivo esta ganadería merece mucho más de lo que hasta el momento le han querido dar. Una apuesta personal, sin vacilar, confió en este toro porque soy consecuente de todo lo que hay detrás.

Por Juanje Herrero

Foto Pedro Ruiz