Todos los políticos no son retrasados mentales pero sí, cualquier retrasado mental ejerce la política. Tenemos miles de casos en toda España pero, el más sangrante es el que hemos conocido ahora en que, el alcalde de Mallorca, el que prohibió la celebración de las corridas de toros en Baleares pese a que el Tribunal Constitucional ha dicho que sí a los toros en las Islas, dicho pájaro, como ha mostrado en estos días el diario El Mundo, nos ha demostrado que es analfabeto puesto que, la redacción de una carta oficial publicada para felicitar las fiestas navideñas, ha sido la muestra sangrante de que, en política puede estar cualquier retrasado mental que, entre las fuerzas de izquierdas son la gran mayoría. Y digo lo de retrasado mental con una enorme pena para las personas que, físicamente padecen dicha carencia; lo triste es que, gentecillas como el citado alcalde balear que, en teoría está bien de salud, ejerce como un retrasado mental.

En Mallorca sucede como en Valencia, manda un tripartito que, entre los tres habría que discernir quién de ellos es más torpe y, lo que es peor, quién tiene más mala leche dentro de su cuerpo. Entre otras muchas taras, dichos tripartitos, la han tomado contra los toros porque, al parecer, es algo que les viene al pelo; y digo que les viene al pelo porque saben que nadie se les pondrá en contra puesto que, la fiesta de los toros, para nuestra desdicha, está dejada de la mano de Dios. Si dichos analfabetos no lo fueran y supieran la de miles de ingresos que los toros aportan a las arcas del Estado español, seguramente cambiarían de opinión. Pero para eso hay que ser inteligente y cabal, algo que estas personas nunca podrán esgrimir porque les corroe el odio y en rencor y, como bagaje político, éste no es otro que ser malvados.

El citado alcalde balear, como sus homólogos catalanes, ha prohibido en las islas que se hable el castellano porque, según él, hay que preservar la lengua vernácula, hasta el punto de que la ATS que ejercía en un hospital de Mahón, al no saber catalán tuvo que renunciar a la plaza que tenía lograda por oposición. Hay que se idiota hasta decir basta puesto que, en Cataluña, Baleares y Valencia, comunidades con dos lenguas, éstas se han hablado toda la vida y no ha pasado nada, pero jamás hubo imposición alguna. No la hubo porque en las instituciones eran regidas por gentes normales; es decir, de los que aplicaban la lógica y el sentido común pero, los que rigen ahora los destinos de muchos pueblos de España, como digo, todos están tocados por la desdicha de ser retrasados, pero en todo; es más, se han visto en un sillón de mando, han enloquecido y ejercen como lo que son, unos dictadores apestosos a los que nadie puede criticar ni mancillar.

Eso sí, casi todos los mandatarios de izquierda ejercen la dictadura al más puro estilo Maduro; todo, por mis cojones. Que el Tribunal Constitucional dice que se pueden celebrar toros en Baleares y Cataluña porque es una fiesta reglamentada, autorizada, todo un bien cultural de España; que digan lo que quieran los altos Estamentos de la Nación porque estas gentecillas se lo pasan todo por el forro de sus cojones y, en el caso de los toros, el que los quiera ver para eso está Madrid que, dicho sea de paso, menos mal que Las Ventas no es propiedad del Ayuntamiento porque de ser así, la tal Carmena ya la utilizaría como perrera municipal.

Pensar, por el amor de Dios, que los que rigen los destinos de los pueblos, caso del alcalde balear, son analfabetos, eso produce una desazón increíble. Como siempre dije, para ser barrendero hay que opositar fuertemente para lograr el trabajo; eso sí, para ser político, con ser rojo y apestoso, con eso basta y sobra para dirigir una Comunidad, un pueblo y si se me apura, una nación.

Si analizamos todos los lugares donde se han prohibido los toros y vemos a sus mandatarios, muy pronto tenemos la respuesta que nos hacemos. Barcelona, Tarragona, Mallorca, Vitoria, La Coruña, Monóvar, Ondara, Villena, Játiva…….ciudades regidas todas por gentes de izquierdas, nacionalistas o burros que suele ser lo mismo. Como digo, estas gentecillas la han emprendido contra los toros, que es su más grande ilusión. Recordemos que en Alicante faltó apenas nada para que se clausurara su plaza de toros cuando mandaba el tripartito destructor; en Valencia porque la plaza no depende del ayuntamiento puesto que, de ser así, un tal Ribó, la hubiera clausurado.  Y así en todos los lugares del mundo donde la maldita izquierda se regodea haciendo daño y destruyendo todo aquello que tiene arraigo popular.

Confiemos que vaya reinando la cordura en este país y que las gentes, al votar, sepan lo que hacen y le entreguen el poder a personas válidas que, en el peor de los casos respeten las tradiciones de España y, los toros, como sabemos, es una tradición antiquísima que tanto ha inspirado a poetas, narradores, artistas de toda índole, sencillamente porque ha sido y sigue siendo una fiesta del pueblo.

 

Pla Ventura