El Ing. Ignacio Díaz de León cuenta que desde niño vivió en el ambiente de la fiesta brava ya que su padre fue juez de plaza en San Marcos y lo llevaba a ver los encierros, a los sorteos y cuando se podía a las novilladas y corridas que se daban en esa plaza hidrocálida. También recuerda con emoción haber presenciado las trashumancias que llevaban los toros desde la ganadería de La Punta hasta el Rastro de Aguascalientes.

Los hermanos Rodarte, en especial José, fueron sus primeros maestros con los que practicaba el arte del toreo, así mismo asistía asiduamente a las tientas que se celebraban en las ganaderías de Peñuelas, La Punta, Garabato y Presillas sin éxito para que le dieran oportunidad de las tres, sin embargo convivía con los toreros de la época como Rafael Rodríguez, Humberto Moro, David Reynoso entre otros. En 1955 un matador de toros apodado “El Estudiante” le hizo ver que lo suyo no era el toreo y tomó la decisión de irse a estudiar la carrera de ingeniero agrónomo, sin dejar de asistir en lo posible a las tientas con el ingeniero Ruiz Barrios.

Pasaron los años y le fue naciendo la ilusión por la crianza del toro de lidia y así en 1977 le compra el Rancho Campo Grande a don Mauro Ruiz Barrios en el municipio zacatecano de San Pedro Piedra Gorda con un lote de vacas y un semental, que al pasar el tiempo lo tuvo que desechar y entonces acude con don Jesús “Chucho” Cabrera y le compra 40 vacas y un semental que fue el simiente de la ganadería. Escoge como divisa los colores: verde, azul celeste y oro.

A partir de 1982 tuvo amistad con don Javier Garfias, a quien le aprendió mucho a cerca de la crianza del toro bravo, y le pasó dos sementales que tenía en su ganadería y que habían sido indultados: el primero de nombre “Mentiroso” herrado con el #106 que había sido lidiado por el maestro Eloy Cavazos en Pachuca, Hidalgo y el segundo marcado con el #26 lidiado por Antonio Lomelín, ambos cárdenos claros.

“Pepe” Garfias le presta en el año 1992 un toro marcado con el #85 que padreó durante dos temporadas. Al año siguiente negocia con el ganadero don Humberto Vega la compra de 25 vacas de procedencia de renombradas ganaderías y un semental de don José Julián LLaguno.

En 1994 adquiere de la ganadería de don Javier Garfias un lote de 15 vacas que pone a padrear con semental que le compra a “Chucho” Cabrera. De este empadre obtiene su primer semental nacido en la ganadería que bautizó con el nombre de “San Pedrino” de pelaje negro listón bragado lucero que estuvo cubriendo vacas de 1998 hasta el 2002.

En el 2000 saca otro semental propio que le pone el nombre de “Hidrocálido” marcado con el #98 de pelaje cárdeno bragado y ahí en adelante empezó a padrear con sementales propios. Su debut lo hace con un encierro para una corrida de rejones celebrada en Puerto Vallarta el 29 de mayo de 1983 con la que participaron los rejoneadores Gerardo Trueba y Pedro Ruiz Loredo que desgraciadamente fue lesionado por su primer toro lo que permitió a Trueba cortar cinco orejas y un rabo.

En los años de 2008 al 2012 la región fue fuertemente impactada por las sequías lo que le produjo muchas pérdidas de ganado por la falta de agua y en el 2010 se presentó un problema severo de seguridad que lo obligó a replegar su actividad ganadera y tomar la decisión de cambiar su ubicación y emigrar paulatinamente hacia el municipio de Lagos de Moreno en el estado de Jalisco.

Escrito por : Cesar Coll Carabias

Fotografia: Oskar Ruizesparza ( Oskar@oskarfotografo.com.mx)

TIERRA BRAVA allende AguascalientesA