Cuando hablamos de Dolores Aguirre, nos viene en el recuerdo esa fantástica ganadera, que cautivo en su momento a media España. Esa mezcla de Atanasio y Conde de la Corte que tanto gusta entre los aficionados. En los años 80 apenas lidio 4 toros en San Isidro y ahora es una de las imprescindibles para el aficionado Madrileño.

Con una camada de 24 toros, esta temporada vuelve al coso francés de Vic-Fezensac, donde ha cosechado grandes triunfos y, sus toros han protagonizado faenas antológicas. También está confirmada su presencia en la mítica plaza de Cenicientos, donde los aficionados más “toristas“  se reúnen en agosto. Todavía no tienen plaza el resto de la camada, aunque no creo que tenga problemas para encontrarla.

Por Francisco Díaz Ruiz (Pelae)