Sobre las diez de la mañana nos personamos en la finca “Los Charcos” propiedad del ganadero, D. José Daniel Guerrero Casabona. Para empezar la mañana nos deleitaron con un buen almuerzo y productos típicos de la tierra, todo ello regado con sus correspondientes caldos.

El bautismo de fuego es el primer “Acto Litúrgico” del ganado bravo.

De esta manera los becerros dejan de ser anónimos y se convierten en una cabeza más de la ganadería con nombre, número e identificación. Es el día de más alegría de los vividos en el año ganadero y uno de los más laboriosos y así fue en la finca “Los Charcos” de la ganadería “Toros de Guerrero” Fuentes de Ebro (Zaragoza). Ganadería muy joven, aunque ya con experiencia celebra su primer Bautismo de Fuego tras su reciente creación en el año 2017.

El pasado sábado día 16 de febrero  de 2019, nos desplazamos a la localidad Zaragozana de Fuentes de Ebro, concretamente a la finca “Los Charcos” donde pastan las reses de la ganadería “Toros de Guerrero” propiedad del empresario y ganadero  D. José Daniel Guerrero Casabona.

Allí espera una jornada campera en la que un joven ganadero cría ganado bravo. Es la ganadería de «Toros de Guerrero». La ganadería formada por D. José Daniel Guerrero en el año 2017 con un lote de  vacas de Las Ramblas, con el semental nº 17 Cazador, de la antigua JG, de la misma propiedad, procedencia Torrestrella, en abril de 2018 se añade  un lote de vacas de la ganadería salmantina de D. José Cruz. Posteriormente en  agosto de  2018 se añaden 16 vacas de la ganadería “Camponuevo-El Ventorrillo”, y el toro indultado  nº 21 de nombre “Tirachinas” de la ganadería “El Freixo” ambas propiedad de “El Juli”.

Bajo la atenta mirada del veterinario de la “Asociación de Ganaderías de Lidia” AGL.  Que dará fe en el registro, irán pasando por el cajón las veintitrés  reses, once  hembras y 12  machos de variado pelaje. Esperan en los corrales de la  plaza de tientas, y que, a partir de ese momento, quedarán marcadas para siempre, una “A” para indicar la Asociación, el hierro de la casa, ambos en el anca de la pata trasera, el número correspondiente en el lomo y el 8 en la paletilla derecha para indicar su año de nacimiento, y con marca de orejas brincada en la derecha  y orejisana la izquierda  machos y hembras.

Esta tarea es dura, delicada y agotadora. Más de tres  horas de trabajo para algunos y de curiosidad para otros. Animales con casi dieciocho meses y otros con menos de un año, que van desde julio de 2017 a junio de 2018, así se considera el año ganadero.

Todo es lento en una ganadería brava, los machos serán los toros de 2022 y las hembras serán puestas a prueba en 2020, pero es bonito y apasionante, y sobre todo algo único y sin duda el bautismo de fuego es uno de esos momentos.

Hecha la faena campera y completada la actividad ganadera, todos se reúnen alrededor de los salones de la ganadería. En la ganadería “Toros de Guerrero”  saben agasajar bien a sus invitados y a los que han sudado por el esfuerzo, una deliciosa comida y productos típicos de la tierra, que  sirven para participar en la mesa y alegrar una jornada taurina entre risas, tertulias, recuerdos y buen humor.

Muchas gracias al ganadero por abrirnos tan amablemente las puertas de su finca. Con esa afición y forma de hacer las cosas, despacio pero con paso firme, seguro llegará a ser una ganadería importante. Gracias.

Por Luis A. Barbero