Todos los artistas han tenido y tendrán sus fieles seguidores que les siguen allá por donde vayan. El mundo del toro no es ajeno a ello, más si cabe que otras disciplinas, si bien es cierto que años atrás tuvieron momentos de mayor esplendor las peñas de los toreros. Hoy en día, posiblemente, la Peña Taurina Jesús Duque sea de las más numerosas y sobre todo la que más se moviliza siguiendo a su torero allá donde esté anunciado.

Su presidente, Juan Arocas, es un ejemplo de afición y entrega a la fiesta de los toros. Incansable, constante y pendiente de todo, es el impulso para que más allá de acudir a los festejos taurinos llenen su agenda con otros actos culturales y visitas al campo bravo.

Hace unos días visitaron la ganadería de Victorino Martín. En Las Tiesas, compartieron jornada con el titular de su peña. Un día «gris», ese gris cárdeno tan típico y característico de la ganadería de la A coronada, referente del aficionado más exigente. Visita por el campo, comida de hermandad, tertulia… un día de los que hacen afición.

Son de Requena, y siguen a su paisano. Lo hacen desde que comenzó sin caballos, desde ese momento cuando Jesús Duque apostó por hacer realidad su sueño. Desde entonces, peña y torero, suman momentos de triunfo y otros más amargos, con una certeza; lo mejor está por llegar. Dicen que quien tiene la moneda la pueda cambiar, y el torero de Requena la tiene. En Utiel el próximo 21 de abril, moneda al aire… ¿Saldrá cara o cruz?