Ramón Valencia, amo y señor de La Real Maestranza de Sevilla,  ya empieza a dar pistas de lo que será la temporada en la capital hispalense. Sin perder su costumbre, y creyendo hacer un bien a la fiesta, su planteamiento sigue siendo redundante, monótono y vulgar. Si D.Diodoro Canorea levantará la cabeza, le daría vergüenza ajena, lo que este hombre ha hecho con su plaza.

Y así, con todo este caldo de cultivo creado alrededor de esta plaza histórica, la desdicha y apatía por ver la variedad, y el toro bravo ha pasado a un segundo plano. Esta temporada nos espera una doble sesión de Juan Pedro Domecq, Garcigrande, Nuñez del Cuvillo y Victoriano del Rio. Una de ellas hará doblete en la feria de abril, otra será designada para el día de resurrección –Morante, Aguado y Roca Rey- y las otras dos irán para la feria de San Miguel.

Una empresa que elude, rehúsa y evita magistralmente la responsabilidad con los encastes en peligro de extinción. Condenando indirectamente a estas ganaderías a una desaparición paulatina, mientras que premia el monopolio y overbooking taurino.

Otras de las ganaderías míticas en Sevilla estarán presentes como son el caso de Victorino Martín y Miura, probablemente en el plantel de 2020 podremos encontrar la ganadería de Santiago Domecq, Jandilla, Fuente Ymbro y la Palmosillo. Quedando completado un elenco totalmente afín al encaste Domecq, y que en muchos casos los ganaderos son familiares.

También podremos decir que la temporada 2020 estará marcada por 4 actuaciones para Roca Rey y Pablo Aguado, tal vez Morante de la Puebla se una con 4 tardes.  Probablemente el Juli actuará 3 tardes en la feria de 2020, junto a Manzanares.

Sin todavía comunicado oficial por parte de la empresa, esto será  probablemente lo que se podrá “disfrutar “ en Sevilla la próxima temporada.

Por Juanje Herrero