• Convocada una pitada de todos los aficionados para mañana 24 de noviembre de 2019 contra la gestión de la plaza de Acho. 

“”¡¡¡ Que viva Acho señor@s!!! Desde que era niñ@ aprendí a querer a esta plaza hermosa que  me vió crecer, y aprendí la historia de mi gran pasión, que llena de gloria nuestra corazón””

Este pequeño párrafo no es mío, está adaptado de la canción criolla “Que viva Perú señores”, en este caso quiero decir con voz alta y clara, “Que viva Acho, y su feria de los milagros señor@s”, porque en ocasiones parece que yo, un español, defiende con más intensidad Acho que los mismos limeños, porque al final, aunque la plaza pertenezca a todos los aficionados taurinos en corazón, es de los grandes aficionados peruanos.

Y yo Juanje Herrero, invoco y apelo  al sentimiento de honor, de amor, de afición y de unidad a los aficionados para hacer un llamamiento a la revolución taurina, para que se escuche la voz del pueblo taurino, que no es otra que la de todos los aficionados que se congregan cada domingo de noviembre en la bicentenaria plaza de Acho.

Esta plaza se merece respeto, dignidad, honestidad, integridad y alma, a esta plaza nadie le falta el respeto, nadie abusa de ella, nadie la ningunea como si no tuviera historia. Esta plaza es el corazón de América, el orgullo de miles de taurinos. A esa plaza se la respeta, ¡¡¡CARAJO!!! Y pobre de que intente hacer daño a la reputación de una de las ferias más importantes del mundo taurino.

La afición de Perú se tiene que levantar de sus asientos y protestar ante tanta estafa, vehemencia y mentira. La afición unida jamás será vencida. No se engañen, quien mantiene la fiesta viva no es ningún empresario, ni ningún gerente, ni ningún administrador, quien realmente la mantiene unida son los aficionados.

“El que no sabe de amores realmente no sabe lo que es martirio” –cuenta un dicho-, y más el amor que tiene los aficionados  Limeños y Peruanos es puro, y el martirio que están padeciendo durante esta feria es demasiado amargo.

Invito a todos los aficionados que vayan a la plaza de Acho, mañana domingo y les obsequien a su gerente J.M Roca Rey y a los empresarios de Casa toreros con una sonora pitada, cencerrada o «matracada», una grandísima bronca que se oiga en todo Perú taurino, en todo el mundo taurino, antes de que empiece el paseíllo. Una bronca que recuerde al empresario que los aficionados no son tontos, que no se les puede engañar, que aman Acho y su feria por encima de cualquier personalidad, y exigen integridad, respeto y verdad. Al final, jurar lealtad a una plaza que está sufriendo las horas más bajas en su historia. No es por dinero, es por principios.

Tal vez, mañana 24 de noviembre de 2019 sea el principio de una revolución taurina que invada el mundo, y tal vez  sean los aficionados de Acho que den ejemplo en el mundo y muestren el camino de la unión.

¡¡¡Que viva Acho!!!

Por Juanje Herrero