Cuando un torero se convierte en héroe, ese es el momento en el que los aficionados le juran devoción, le rinden pleitesía y le demuestran gratitud. Ayer Javier Cortes poco pudo dejar para la galería pero sus ganas se palpaban desde el tendido, y por esas ganas, por esa torería y por quedarse en el sitio tuvo probablemente el peor percance de su carrera.

Un tío valiente, que se ha jugado la vida con todo tipo de encastes sin necesidad de cambiar su estilo, porque la pureza la lleva por bandera en cada plaza que torea. Con respeto por el chispeante y por los cánones,  a Javier Cortes siempre le toca bailar con la “mas fea” y aunque demuestre torería y gallardía, todavía ninguna empresa le ha ofrecido cambiar de pareja y aliviarle en alguna corrida la carga de los valientes, que no es otra que salvar los encastes minoritarios y lucir al toro. Esa misma carga, que las figuras no quieren llevar, ni compartir, ni mucho menos ver.

Ayer en los primeros compases de su faena al tercero de la tarde – Primero de su lote- su pureza y estar en el sitio le costó una grave cornada, en ese momento, cuando la sangre brotaba de su ojo, la gente empezó a murmullar, algunos decían que mala suerte, otros que pena… es un torerazo, los tendidos quedaron impactados, y otra vez más Javier Cortes pagó con sangre en Madrid sus ganas de triunfar. Hemos hablado con su apoderado, quien con buen talante nos atendió esta tarde. Le preguntamos por cómo se encontraba Javier y nos contestó “Dentro de la gravedad es una persona fuerte, hoy está más animado y él es consciente de lo que tiene, la operación ha salido bastante bien” prosigue hablando de las lesiones de Javier “el globo ocular lo tenía totalmente reventado, se lo han reconstruido completamente, al parecer nos han dicho que por el ojo no se teme, siempre y cuando no aparezcan temas de infecciones” para acabar hablando del nervio ocular “ el tema del nervio es delicado, al tener un fuerte impacto está muy inflamado, y va a ir muy lento, todavía los médicos no nos saben decir si va a tener visión o no, hay que ir con mucha cautela porque no saben todavía si volverá a ver o no”.

Todavía no hay diagnostico pero lo que está claro es que Javier Cortes seguirá luchando con la humildad que le caracteriza para recuperarse y volver lo antes posible a los ruedos.

La vida te ha retado una vez más a otra batalla, pero muy pronto torero la ganaras.

Por Juanje Herrero