Miguel Ángel Perera recibe el alta médica y abandona la Clínica Quirón de Zaragoza en compañía del doctor Carlos Val Carreres, que revisó de nuevo esta mañana la evolución de su herida

A su salida, Perera agradece la atención exquisita recibida estos días tanto por el equipo directivo como médico del hospital. Sencillamente un fuera de serie.

Y, por supuesto, se acuerda muy especialmente de su compañero Mariano de la Viña, de cuya familia ha estado muy cerca estos días de estancia en la Clínica Quirón, arropándoles y acompañándoles en el deseo de su recuperación