Ambato fue la plaza elegida por Padilla para despedirse de ruedos ecuatorianos. La segunda y última de feria vio como salió a hombros junto con Juan Bautista que derrocho arte en el quinto de la tarde. Un apéndice se llevo el quiteño Álvaro Samper.

Guajiro un melocotón de buenas hechuras fue quien abrió plaza, y al que Juan José Padilla desde el principio quiso demostrar su ambición y ganas de triunfar. Lo recibió con tres largas cambiadas en el tercio para encender al público. no defraudo en banderillas y causo el espectáculo que muchas veces el aficionado ecuatoriano pudio ver del torero jerezano. Lastimosamente el toro se pego un fuerte golpe en el burladero mientras “El pirata” brindaba al público, le dio tiempo para recuperarse y el toro respondió bien, lo cuido mucho para poder sacarle pases por ambos pitones destacándose la nobleza y la movilidad que el toro brindaba a pesar de llevar un pitón golpeado. Los molinetes y los naturales fueron el epilogo de un trasteo de mimo al toro, para desplantarse dos veces ante el aplauso de los tendidos. La estocada un poco caída fue la excusa para que el presidente no concediera la oreja que fue pedida con mucha fuerza. Todo termino con una vuelta al ruedo y una bronca al palco.

Juan Bautista triunfador del año pasado, tuvo que verse con turo que en la muleta se paro muy pronto y que se quedaba corto en las embestidas. Intento en dos ocasiones, pero el toro no tenia lo que su arte necesita, así que se fue por la espada. Lo mejor fue cuando recibió al toro por verónicas muy ceñidas y que llevo muy toreado al animal hasta el centro del ruedo. Un pinchazo y estocada, dejo todo en silencio y pitos para el toro.

Tampoco tuvo mucho material Álvaro Samper ante un “Reservado” de Mirafuente que hizo honor a su nombre. Este toro alto fue recibido con buenas verónicas para rematarlo con una media. Peleo en el caballo y parecía que iba a sacar su casta, pero a partir del tercio de muleta el animal empezó a quedarse corto y el quiteño intentaba sacar muletazos de uno en uno perdiéndole pasos, hasta que el animal se quedó. Para finalizar la faena unos machetazos y una estocada caída, también dejo en silencio su actuación.

“Distraído” fue el último toro de Padilla en el Ecuador. Empezó la ultima de sus faenas por medio de doblones, ante un toro que empezó a repetir y que tenia buen fondo. Brindo el toro del adiós a Juan Francisco Hinojosa, que la tarde anterior le había brindado el toro a Padilla. Los tres pares de banderillas destacándose el par de adentro hacia afuera enloqueció al público y que empezó a levantarse de sus asientos y aplaudir la actuación del jerezano. Empezó de rodilla llevándolo al toro de lado a lado justo al frente del burladero de matadores, fue ese inicio explosivo lo que ayudo al toro que demostró que en cercanías podía seguir los vuelos de la muleta. Esa raza del toro saco el motor que llevaba dentro, pero ya con el izquierdo el toro no terminaba de humillar sin embargo seguía la muleta. Al final un circular mirando a los tendidos y el desplante. Un circular invertido el toro ya soltaba la cara, entonces fue por la espada, al primer intento hizo guardia y al segundo una buena estocada terminaron con su oponente, y el palco excesivamente entrego las dos orejas.

El arte de una Juan Bautista que veía de torear en Colombia hizo las delicias del público. ese toreo caro lleno de sabor. Recibió un “Apasionado” de color castaño oscuro con una larga cambiada y verónicas de pies juntos que fueron jaleadas por los tendidos, pasándose al toro cerca de la taleguilla. Un galleo por chiquilinas, despaciosas y con cadencia para colocar al toro frente al caballo que fue muy bien picado. Empezó su faena de igual manera, con doblones y de rodillas llevando al toro hasta el final del muletazo. En la segunda tanda empezó a demostrar su corte artístico, con la mano derecha lo toreo despacio y con suavidad, llegando a relajarse frente al animal y viendo a los tendidos en uno de sus derechazos. Los pases de pecho llevándolo hasta el hombro contrario eran magníficos. Con la izquierda logro ligar varios pases. Un estoconazo efectivo y sin puntilla fueron suficientes para cortarle las dos orejas al animal de Vistahermosa.

Álvaro Samper fue el encargado de lidiar el último de la feria, salió por todas para no dejarse ganar la pelea. Ante un toro que desde el principio se dejo y lo llevo toreado por verónicas de buen gusto hasta el centro del ruedo. Las dos entradas al caballo le pasaron factura al animal que en la muleta empezó a comportarse un poco tardo, así que el quiteño tuvo que hacer un toreo de cercanías, ir exprimiéndolo y sacando cada embestida e intentar llevarle largo. A base de quererle y poderle puso sacar derechazos de uno en uno. Las manoletinas y una media estocada efectiva para que el público pidiera la oreja que bien merecida la obtuvo.

FICHA DEL FESTEJO


Segunda y última de Feria 


Un poco más de media entrada

 

Toros de Vistahermosa y Mirafuente: desiguales de juego y presentación

JUAN JOSE PADILLA: vuelta al ruedo con fuerte petición y bronca al presidente y dos orejas excedidas

JUAN BAUTISTA: silencio y dos orejas

ÁLVARO SAMPER: silencio y oreja

Incidencias:
– Juan José Padilla recibió un homenaje por parte de la empresa en reconocimiento a su trayectoria

Texto: Edwin Baño

Fotografia Andrea Grijalva