Es reconfortante saber que todos los heridos en las últimas ferias se están restableciendo de sus horribles cornadas, tanto Gonzalo Caballero herido en Madrid, como Mariano de la Viña, en Zaragoza. Ambos toreros, en aquel envite, pudieron haber perdido la vida. Es cierto que, pese a la gravedad de sus tremendas cornadas, si hay que hablar de suerte dentro de toda la desdicha, no es otra que ambos toreros cayeron en las manos sabias de los doctores García Padrós y Val Carreres.

Según aquellos partes médicos que se emitieron, todos temimos por sus vidas que, con la bendición de Dios, como decíamos, se están recuperando para que, en breve espacio de tiempo todo quede en una dura anécdota que, sin lugar a dudas, los toreros no olvidarán jamás.

Los nombres antes citados han hecho correr mucha tinta puesto que, las cornadas que sufrieron así lo demandaban, pero no debemos de olvidar la gravedad que supuso la herida que sufriera Arturo Macías a primeros de septiembre en Madrid que, como se demostró, Macías hizo lo que podríamos llamar como un viaje sangriento puesto que, fue venir y volver, eso sí, con una cornada gravísima que le ha alejado de los ruedos durante tres meses.

Vimos hace pocas fechas un reportaje que le hicieron a Arturo Macías al respecto de sus cornadas y, las fotos que pudimos ver, nos produjeron escalofríos al ver el cuerpo de Macías lacerado por toda su anatomía. Si como dicen los toreros, una cornada es una medalla, Macías luce el santoral por todo su cuerpo.

Por cierto, como quiera que Macías vive en México y hace campaña en su país natal, según hemos podido saber reaparecerá el próximo dos de diciembre en Tlaxcala.

Mostramos aquí nuestra inmensa alegría para todos los heridos que van mejorando de sus heridas que, con la bendición de Dios y con la pericia de los doctores que les atendieron, han salvado sus vidas, que no es poco.

Toros de lidia.es

En la foto, Arturo Macías, el día de su tremenda cogida en Madrid.