-Nacido y criado en el mundo rural de tierra de campos zamorana, se propuso triunfar en el toreo y utilizó las capeas para no volver al arado con bueyes o el pastoreo vacuno.

-Aprendió a torear en la “Escuela de Castilla” que el histórico torero Saleri II tuvo en Vista Alegre con cientos de alumnos. Se  hizo torero en Salamanca.

-En Logroño cortó 5 orejas sin picadores y de matador solo toreó dos corridas en la feria: Miura y Victorino.

Andrés Vázquez murió el pasado 17 de junio a los 89 años. De inmediato escribieron sobre él y su historial Antonio Lorca en EL PAÍS, Paco March en LA VANGUARDIA, Julián Maestro en TOROS DE LIDIA, Andrés Amorós en ABC, Paco Cañamero en APLAUSOS y su GLORIETA, Ruiz Villasuso en MUNDOTORO, Zabala de la Serna en EL MUNDO, …y ahí están los libros “MEMORIAS DE UN TORERO”, de Agapito Modroño y “ANDRÉS VÁZQUEZ

¡PASIÓN TORERA! de Paco Cañamero con cientos de fotografías y su biografía completa ¡Por dar una pista completa!. Hay datos biográficos y resultados artísticos irrevocables. Trataré de escribir sobre Andrés hasta que me canse para, entre otras cosas, tener un poco de orden con los miles de apuntes, y cientos de fotografías que guardo. Espero aportar algo a lo histórico ya editado. Al menos algunos pasajes personales y otros no publicados.

Conocí personalmente a Andrés Vázquez en  otoño de 1960. Iba entrenar a diario a lo que llamaban, en Salamanca, La Sindical. Entre las carreteras de Fuentesaúco y Zamora. Eran unas instalaciones siniestras y míseras de Educación y Descanso: Un frontón chico, un campo de fútbol de tierra rodeado de una “pista” de atletismo, unos vestuarios tercermundistas y una perrera con los galgos del delegado de la Institución. Guarda y encargado el señor Eloy, de Ledesma.

Allí acudían Julio Ramos, Víctor Almaraz,  José Luis Barrero, Camperito de Salamanca, Giraldés, Miguel Flores, El Candi, Vicente Brines, César Ortega, Manolo Romero, El Tino, Dámaso Gómez, Cuadrado, José Llantada “El Maestro”, Valerito, Joaquín Cortés “Niño del Abanico”…En invierno toreros de toda España y los Hnos. Girón. Antoñete, Orive, “El Califa”,  Chacarte, Bernadó, Luis Segura…Era la época de los tentaderos. Viendo entrenar a los citados, y en tentaderos, perfeccionó la técnica taurina El Niño de Villalpando que luego enriqueció con la práctica y hermoseó con personal inspiración y regusto. Vestía pantalón de pana y siempre se acompañaba de una barra de hierro forrada de cuero para fortalecer el brazo, lo que ayudó a utilizar en las lidias el estoque de matar  de forma natural.

Andrés estaba en Salamanca hospedado en  humilde pensión, san Julián frente a la iglesia del mismo nombre, y se enganchaba en algún trabajillo de pintor de obra o similar. Con él entrenaba un joven de su pueblo que debía ser barbero y del que nunca más se supo o supe.

“El Nono”, su primer mote siendo muy niño, nació en Villalpando, Tierra de Campos zamorana, el 25 de julio de 1932. Familia de labriegos y 7 hermanos. Su padre, Antonio “Belmonte”, era labrador y trataba con ganado. Tiempos de roturar la tierra con mulas o bueyes, segar con hoces, trillar en las eras con aquellos “aparatos” que trituraban la mies con piedras y sierras bajo la madera, formar la parva, ablentar…Andrés se negaba a continuar las tareas paternas y adoraba a los toreros capeadores de su pueblo que protagonizaban los festejos de las fiestas de san Roque…y localidades de la región y provincias limítrofes. Especialmente a El Velas que, era el jefe de la banda, le pasaba a Andrés “El Nono” diez años y hasta vistió de luces. Otros que mentaba  Andrés fueron los Villasante, Paliza, Sabandija, El Currero, Perules, El Poto, Guardiola, Bombilla, El Meco…

En las capeas es imposible aprender a torear ya que la inmensa mayoría de las reses que soltaban eran o viejas con experiencia, o corridas, toreadas, resabiadas y con peligro. Todo lo más permitían aprender a regatea, saltar, dar mantazos y salvar el desorden y la improvisación como defensiva. De “torear” nada.

El Nono aprendió a torear, como otros cientos de chavales más, en la escuela carabanchelera de Saleri II que en numerosas tardes alternó con Joselito y Belmonte. Andrés aprendió a ser torero, y el toreo, en Salamanca. El alcarreño Saleri II se formó toreando por los pueblos cercanos a Madrid, plaza en la que tuvo muchos años gran cartel, fue popular en las capeas de Castilla y le dio la alternativa Vicente Pastor. Este Saleri II, alternando con Joselito El Gallo y Juan Belmonte, toros de Saltillo, inauguró la plaza de Logroño (1915-2000) y obtuvo la primera oreja. La única que se cortó esa tarde. Esas temporadas toreó muchas corridas de toros en España y América.  Andrés solía lamentar que no le viera destacar pues murió al final de los cincuenta siendo “nadie”  el Labrador de Villalpando.

En 1951, con un esfuerzo familiar, Andrés va a Madrid para asistir a la escuela de Saleri II. Seleccionado entre muchos, torea en Vista Alegre. Sufre una cornada grave y corta una oreja. En selección posterior torea en Las Ventas con Sánchez Jiménez y Carnicerito de Almería a favor de los “pobres de La Inclusa”. Sale a hombros. Se calienta el ambiente en su pueblo y el padre organiza, como empresario, el Domingo de Resurrección (13-4-52) , una novillada en Zamora alternando con Carnicerito de Almería, del que no recuerdo nada extraordinario. Desastre que puso de moda  “es más malo que El Nono” o “ha estado peor que El Nono en Zamora”. Ya nadie, ni en su pueblo, le ve porvenir torero.

Cumple dos años de “mili”, 52-54, en la base de Torrejón, de voluntario, y contaba cómo su misión fue mantenimiento de las instalaciones y paracaídas de los americanos. Se hizo amigo del alcalde de Torrejón, el buen taurino Ramón, que tenía una finca cerca de la base. Andrés le cuidaba los caballos y le atendía en otras labores con las vacas de leche y a cambió el alcalde le dio algún festejo. En el 54 volvió al pueblo sin porvenir ni oficio, sabiendo torear, mozo y sin ganas de laborar en el campo y pastoreo familiar. En el 56 se instaló en Salamanca, huyendo de la esteva del aladro, donde alternaba trabajos ocasionales con entrenamiento y festejos en los pueblos que le buscaba el señor Primi Lafuente, banderillero y con ropa de torear para alquilar ¡Y dos hijos novilleros!: Victoriano y Adolfo, buen banderillero, que vive en Salamanca con más de 90 años. Se fogueó por pueblos de La Armuña, Guareña, tierras de vino y Arévalo…

El señor Primi fue  causante de que Andrés progresara y le ayudó en muchos festejos y tentaderos. En 1959 ya toreó alguna novillada sin caballos de cierto nombre. Por ejemplo en Vitoria y esencialmente por tierras de Zamora y Salamanca.

Se hizo cargo de su carrera el abogado salmantino Santiago Santos Roda, que vivía en la calle Prior de Salamanca, de la Plaza Mayor a Monterrey, y era su mozo de espadas Manuel Zorita, del barrio de La Vega y Puente Nuevo, “rasca” de la cafetería Las Torres de la Plaza Mayor salmantina. Se notaba avance. El año 1960 fue su despegue. Tenía  28 años. Triunfaba en plazas salmantinas (Tamames, Ledesma, Guijuelo…) y toreó en Logroño tres novilladas sin picadores los días 17 y 24 de abril y el 1 de mayo. Alternó con Palmeño, Pirri III, Curro Ortuño, Tinín I y Julio Molina “Algabeño”. Sumó 5 orejas y dos salidas a hombros. Por cierto: En los libros de su biografía no constan estos pasajes de Logroño que fueron los más importantes sin caballos de su historial. Ese mismo año, el día de san Pedro, mató una novillada de Sánchez Arjona, alternando con El Algabeño, en Haro.

El 12 de junio de 1960 vi torear por primera vez a AV. Domingo y san Juan de Sahagún, patrono de Salamanca. Festival de las Hermanitas de los Pobres: Pedrés,  Ostos, Paco Camino, Miguel Flores, Giraldés y Andrés Vázquez. Triunfó Camino cortando 2 orejas y con una lección de facilidad, poderío y buen gusto. Únicos trofeos. Andrés superó varias volteretas y salió de La Glorieta mejorando su cartel.

Ya que estamos por la zona, añado que la feria de Logroño casi no existió después de sus éxitos novilleros. Tomó la alternativa con 30 años en el 62 y debutó de matador de toros en Logroño el año 1970: El 21 de septiembre con toros de Miura. Cortó la única oreja alternando con Efraín Girón y Antonio Lomelín, pitados. Ángel Peralta en el prólogo obtuvo 2  orejas. No volvió hasta el 77 con “victorinos” y tuvo bronca. Alternó con Arruza y José Mª Manzanares que cortó 3 orejas.

El año 61, decisivo en su carrera, 8 tardes en Vista Alegre con Barrero, El Millonario, El Caracol, Perucha, Aragón…y otras en Valladolid, Barcelona, Salamanca…y varias en Las Ventas de Madrid. Alternó con El Cordobés, Antonio León, Amador, Chacarte, Orteguita…Novilladas cumplió en Barcelona, Málaga, Córdoba, Cartagena, Salamanca, Zaragoza, Marsella, Segovia…haciendo el paseíllo con Corbacho, Terremoto, El Cordobés, Andrés Hernando, Efraín Girón, Antonio León…Se hizo cargo de él Isidro Ortuño “Jumillano” y pronto “Maravilla” que le adelantó dos millones de pesetas y lo instaló en el hotel Capitol de Madrid. Ya se olvidaban de El Labrador de Villalpando, lejos quedó El Niño de Villapando y al final algunos lo nombraban como El Brujo de Villalpando.

Pedro Mari Azofra

PIES DE FOTOS

-Años 50. Estampas camperas en el campo charro con Bernadó, Carriles, Victoriano Posada, Florentino, Dionisio Recio, El Zamorano…Debut el año 60 en Logroño con los banderilleros locales Illera, Matorroy el asesor Paco Miranda. Toreando un novillo en La Manzanera de Logroño y ya de matador brindando un toro de Miura al cirujano de la plaza logroñesa (1970) al cirujano Martínez Íñiguez.