El Círculo Taurino Universitario Luis Mazzantini, presidido por el profesor Javier López Galiacho, con sede en el Colegio Mayor Universitario San Pablo de Madrid, ha condecorado al maestro y crítico don Javier Villán con el premio Nacional de Tauromaquia Joaquin Vidal.

Dicho premio viene a engrandecer todavía mucho más la labor llevada a cabo por el magnífico crítico don Javier Villán que, teniendo su casa atiborrada de premios que hacen honor a su brillantísima carrera como crítico, literato, poeta, ensayista y autor de numerosos libros.

En esta ocasión, recibir el Premio Nacional de Tauromaquia Joaquín Vidal, con toda seguridad que habrá iluminado el alma del señor Villán puesto que, para su fortuna, durante tantísimos años compartió un enorme nexo de unión entre él y el maestro Joaquín Vidal, cuyo nombre lleva aparejado el importante galardón como es el Premio Nacional de Tauromaquia.

El crítico premiado ejerció como tal en el diario El Mundo que, a primeros de este año terminó su relación profesional tras más de cuatro mil artículos escritos y miles de crónicas plasmadas en dicho diario que, para su desdicha, su relación no terminó de la forma que en verdad merecía una pluma de la relevancia de Javier Villán.

Villán se definía a si mismo como un poeta apasionado por los toros y, en honor a la verdad, su crítica no era otra que la defensa de la pureza de la fiesta y, por ende, su esplendor por aquello de narrar el arte que fluía de las manos y sentidos de los grandes toreros a los que enjuició que, para mayor grandeza, en las tardes menos afortunadas de los diestros que admiraba, Javier Villán pasaba un mal trago por aquello de contar la verdad de lo que había visto en el ruedo.

Como nos han contado nuestros compañeros, a Javier Villán se le iluminó la mirada al recordar al que fuera su amigo y excelente crítico y periodista, Joaquín Vidal que, para fortuna de ambos, Villán ha recogido el premio que inmortaliza al que fuera amigo personal.

Según nuestro parecer, nunca un premio fue tan justo y rotundo como el que se le ha concedido a Javier Villán, toda una institución en el mundo del periodismo, la poesía y la literatura.

Enhorabuena maestro Villán, que Dios le siga bendiciendo con el tesoro de la salud.

Pla Ventura