El caso de Carlos Aranda es digno de estudio puesto que se trata de un novillero completísimo, un hombre con una torería admirable, curtido al paso de los años y, con apenas veinticinco años, un chaval, tiene un bagaje maravilloso como torero.

Si echamos la vista atrás respecto a la novillería, Carlos Aranda es un torero forjado a la antigua usanza puesto que, son muchos años como novillero para, como así sucederá, llegará  a la alternativa con una preparación admirable y digna de alabanza.

Aranda empezó como novillero sin caballos hace diez años hasta que, el pasado 31 de mayo de 2014 debutó con los del castoreño en Guadalajara con un triunfo grande. Muchas han sido las corridas toreadas en estos años hasta el punto de que, Carlos Aranda, es un novillero consagrado porque, entre otras muchas plazas, triunfó en Las Ventas en el pasado año 2019 en dos actuaciones memorables. Todo estaba preparado para su alternativa en el 2020 pero, ya vimos que, el hombre propone y Dios dispone. La pandemia destrozó a España entera y, el mundo de los toros no escapó de dicho maleficio, razón por la que Aranda se quedó “compuesto y sin novia”; no hubo alternativa posible.

Hemos podido saber de la dádiva pronta de Carlos Aranda para con los suyos y, su acción, emociona por completo. Quizás él no esté muy de acuerdo conmigo al revelar su secreto que, hay acciones en los seres humanos que, además de propagarlas, son las que hablan del propio individuo. Aranda regaló, días pasados, a la hostelería de su pueblo mil kilos de cebollas con la finalidad de ayudarles en la medida de sus posibilidades que, como barruntamos no son muchas, pero si de una dignidad admirable. Es como si cualquier figura del torero hubiera donado cien mil kilos de comida para Cáritas, esa sería la equivalencia. Por cierto, que tomen nota las figuras del toreo de lo que he apuntado.

El domingo pasado  reapareció en Ossa de Montiel con un triunfo grande, algo muy positivo porque tras un año y medio sin torear y que diera aquella magnitud admirable, es digno de alabanza a favor del diestro ciudadrealeño, de Daimiel de forma concreta. Quedaba clarísimo por qué Aranda estaba dispuesto para la alternativa.

-Reapareció usted en Ossa de Montiel con un éxito fantástico tras casi un año y medio sin torear, algo que no se le notó a para nada. ¿Dónde tenía guardado el secreto para que nadie nos diésemos por enterados de que hacía mucho tiempo que usted no se ponía delante de un toro?

Una tarde muy bonita Luis y de muchas emociones por volver a verme vestido de torero en una plaza y la verdad es que disfruté mucho desde que salí del hotel hasta que me quité el vestido, de nuevo pude mostrar mi concepto y mi personalidad y llamar la atención de los aficionados, aunque soy consciente de que el camino que me queda por recorrer es largo.

A pesar de no verme anunciado en este año y medio, nunca he dejado de prepararme y trabajar cada día por mejorar y conseguir aquello con lo que sueño, y lo del domingo es una inyección de moral para seguir haciéndolo con más fuerza, fe, e ilusión si cabe…

-En el toreo, amigo, muchos son los llamados y pocos los elegidos. ¿Por qué cree usted ser uno de los elegidos?

Mi vida sin torear no encuentra ningún sentido, creo que ahí es donde encuentro todas mis respuestas a esos miedos e incertidumbres que uno siente antes de enfundarse el vestido de torear y partir a la plaza….

-¿De dónde le viene a usted esa locura por ser torero?

Es algo innato , nací en Daimiel en el seno de una familia humilde de agricultores y con la cultura de trabajar para poder sobrevivir desde que era un niño, sin apenas uso de razón era ver una corrida por  televisión y quedarme hipnotizado  por aquella obra,  que un hombre de carne y hueso era capaz de realizar ante tal fiera ….

Mis sueños siempre fueron vestidos de luces….

-Tras aquella afortunada tarde de otoño en Las Ventas del año 2019, desde aquel instante, ¿qué proyectos tenía usted para el año venidero? Y se lo pregunto a sabiendas de que todo se vino abajo.

Sinceramente tenía la sensación de empezar a contar en carteles y en sitios donde antes no estaba mi nombre; y de hecho trabajé muy duro durante el invierno para llegar preparado a esos compromisos, fue duro que de la noche a la mañana todo se viniera abajo, pero en esta vida cuando caes, de nada sirve lamentarte, toca sacudirse el polvo y seguir luchando y caminando con más fuerza.

-Fíjese que, el hombre compone y Dios dispone, hasta el punto de que la pandemia lo destrozó todo y, el mundo de los toros ha sido uno de los sectores más azotados. ¿Qué pensó usted cuando nos dijeron a todos que estaríamos casi un año encerrados sin poder salir de casa?

Ha sido un tiempo muy difícil, pero a su vez me ha ayudado a crecer y madurar como persona y a la vez cómo torero… He tenido mucho tiempo para hablar conmigo mismo y plantearme qué es lo que realmente quiero y que estoy dispuesto entregar para conseguirlo.

El toreo es lo que da sentido a mi vida y lo que me hace feliz.

-La pregunta es totalmente tópica, pero muy obligada. ¿Cree usted que nació para ser torero o tiene que enseñarse como cualquier otro oficio?

Sinceramente, creo que torero se nace, pero después se necesita un trabajo y una disciplina para poder llevarlo a cabo, con lo cual creo que torero se nace, pero después, con el día a día y el saber, da experiencia, el torero se hace.

-¿Cuánto tiempo lleva como torero y cuántas novilladas ha toreado?

Mi primer becerro en público fue con 14 años y a raíz de ahí en numerosos certámenes y novilladas sin caballos hasta mi debut con picadores, toreado más de medio centenar de novilladas picadas y me siento preparado para afrontar compromisos importantes y grandes retos.

-¿Qué diferencia existe, por ejemplo, al torear en Madrid o en cualquier pueblo?

Con todos mis respetos solamente puedo decirte que Madrid es especial…

Es la plaza con la que sueño y me gustaría poder llegar alcanzar un día ser torero de Madrid.

-El mundo del toro, Carlos, en demasiadas ocasiones es sinónimo de hambre y miseria. ¿Qué argumentos tiene usted para que eso no sea así, más bien, todo lo contrario, grandeza al por mayor?

El toreo es un espectáculo grandioso, mágico y así tenemos el deber de conservarlo y hacer que perduren todos los que amamos la tauromaquia.

Debemos transmitir a las generaciones venideras  el legado y todos esos valores que a lo largo de la historia nos han dejado nuestros antecesores y mostrarles la grandeza y verdad que esconde el misterio del toreo.

-Me ha contado que entrena usted con el maestro Sánchez Puerto. Deje que le diga que, como maestro, ha acertado usted por completo. ¿Qué le aporta el maestro que usted no sepa?

No puedo hacerlo de forma diaria ni como a mí me gustaría puesto que el maestro vive en Madrid y yo vivo en Daimiel.

Pero he tenido la suerte de poder entrenar con él y alimentarme de su conocimiento y de su forma de sentir y expresar el toreo

Solamente escuchar hablar al maestro Antonio te transmite todo los valores qué hacen falta para poder ser torero

-¿Es cierto que usted hace de “toro” cuando entena con el maestro?

Puedo decir que he tenido la gran suerte de pegar algunas embestidas al capote y la muleta del maestro Antonio que son fuente de inspiración y torería de la cual se alimenta todo aquel que sueña con ser torero.

-Por cierto, a tenor de lo que antes la hablaba, la crueldad del mundo de los toros es una constante y, Sánchez Puerto es el referente de lo que le digo. Un torero de los años ochenta como el maestro, torero puro, cabal, auténtico, un lujo de torero y ser humano y…….no pudo ser. ¿No le desmoraliza la historia del maestro?

El maestro es un espejo para mí y fuente de inspiración para todo aquel que le guste el toreo puro, clásico y profundo

Después lo de ser figura depende de muchos factores…

-¿Ha visto torear usted a su ídolo, es decir, el maestro Sánchez Puerto?

En directo solamente he tenido la suerte de poder verlo en el campo y toreando de salón

Pero he podido ver grandiosas faenas en vídeo de tardes como la de Madrid con aquella corrida de Victorino o una gran tarde donde inmortalizó el toreo a la verónica con un toro de Pilar Población

-He podido saber que, al margen de su carrera como torero, es usted capaz de trabajar, algo que le dignifica por ambos lados; como torero y como hombre. ¿Cómo compagina ambos menesteres?

Efectivamente, por desgracia a día de hoy no puedo vivir de lo que me gusta y es mi pasión, con lo cual he tenido que buscarme un trabajo al margen del toreo y que por otro lado pues también me ha venido bien para crecer, madurar, relacionarme con otro tipo de gente y sobre todo darme cuenta de que lo que realmente me hace feliz y quiero ser en esta vida es torero, vivir sin torear no es vivir…

-Vive usted en una tierra hermosa si hablamos de toros porque, para su fortuna, en Ciudad Real hay plazas por doquier, lo que viene a ayudar a los toreros de forma genérica y, para que la fortuna sea mayor, gozan ustedes del canal CMM que tanto bien le hace a la fiesta de los toros. ¿Qué piensa usted al respecto de las retransmisiones de la que le hablo?

He de dar mi enhorabuena y agradecimiento  a la televisión de Castilla-La Mancha por apostar claramente y sin complejos en apoyar, promocionar y divulgar la fiesta de los toros

En los tiempos que corren es importante que el toreo tenga un espacio en los medios de televisión y se nos muestre  dando  voz e imagen a todo el mundo

-¿No ha llegado usted a perder la ilusión por completo, a tenor de las macabras circunstancias que nos sumió la pandemia?

Soy un hombre de fe, y ante las adversidades intento sacar lo mejor de mí, no hay de negarte que han sido momentos muy duros y difíciles, cuesta entrenar con ilusión después de llegar de una jornada de trabajo y sin tener una fecha en la que verte anunciado, pero es ahí dónde has de sacar lo mejor de ti para cuando llegue el momento poder mostrar todo eso que llevas dentro de ti.

-¿Quién es el hombre que le ayuda en su carrera para que la misma sea una realidad?

A día de hoy no tengo apoderado realmente a lo largo de mi trayectoria. Como novillero nunca lo he tenido, pero si cuento con el apoyo de profesionales que creen en mí y sobre todo de mi familia y en especial mi hermano Jesús.

-Lo lógico es que usted se entregue en cuerpo y alma a su carrera pero, ¿qué plazo se ha puesto en su vida para lograr el triunfo que le consolide o abandonar para siempre?

La verdad es que no me he puesto ningún plazo, lo que sí tengo claro es que el toreo es mi vida estoy dispuesto a entregar todo por conseguir aquello con lo que sueño independientemente de que logre alcanzarlo, pero sobre todo de lo que sí estoy convencido es que disfrutaré del camino

-Tal y como están los tiempos preguntarle por su alternativa no sé si será una estupidez lo que le digo. ¿Qué me dice usted?

No hay ninguna estupidez, es una pequeña meta, un día especial en la vida de cualquier torero y para el cual me siento preparado, lo que no sé es cómo ni cuándo se producirá, pero si espero que sea el inicio de un camino importante en mi vida y mi carrera cómo torero.

-Imagínese que dentro de muy poquito tiempo se convierte usted en figura del toreo. ¿Cree que ese estatus del que le hablo podrá hacerle perder la memoria? Se lo digo porque existe un dicho popular que dice que Dios nos libre de un pobre rico.

Ojalá que pueda alcanzar ese sueño de ser figura del toreo.  Lo más importante en esta vida es saber a dónde vas pero sobre todo saber de dónde vienes, reflexión lógica que le hago a tenor de su pregunta, la cual creo que queda respondida.

-Añada lo que su corazón le indique.

Pues agradecerle que me haya dedicado este espacio y que me haya permitido expresarme como soy y darme a conocer entre sus muchos lectores y buenos aficionados, con los cuáles espero poder encontrarme pronto en las plazas de toros. Un fuerte abrazo.

Pla Ventura

En las imágenes, bellísimas instantáneas de la torería inenarrable de Carlos Aranda.