Llevamos unos cuantos días de feria, está pasando un poco de todo, bueno, malo, y sobre todo una cosa importante , mucho público y decimos público. Otra cosa son los aficionados que como ya dijo alguien, en un autobús los metemos a todos. Es bueno que la gente asista al espectáculo. De ahí saldrán aficionados, seguro.
Por ejemplo, si han visto a Román. Ganas, valor y algún muletazo que otro con mucha exposición.
Hoy nos dirigimos al consejo taurino ese que chupa y no paga entrada. También al señor Abellán que es matador de toros y sabe lo difícil y peligroso que es torear con viento. A la señora Ayuso que presume de aficionada y de defensora de la fiesta.
En lo que va de feria el viento se ha hecho presente todas las tardes, jorobando, dificultando la lidia como lo lleva haciendo desde que se inauguró la plaza. El deterioro de plaza es más que lamentable, tanto en los exteriores como por dentro, Van tapando humedades, goteras y muy poco más.
No sabemos a qué dedican lo que sacan del canon, que por cierto es el único inmueble de la CAM al que se le cobra una renta y no pequeña. No estaría mal dedicarlo a cuidar la plaza.
Hace tiempo que se viene hablando de lo importante que sería cubrir la plaza y tienen proyectos encima de la mesa de cierta importancia, que no afecta para nada al edificio.
¿Cuántas faenas se van al traste por el viento? Es el peor enemigo de los toreros. También acabaría con la lluvia y con la solanera. Sabemos que las cogidas a veces son inevitables y también necesarias para mantener viva la fiesta, si no tuviera riesgo no tendría sentido. Si te coge toreando, mala suerte. Lo peor es que te coja por el viento, malo para el torero y malo para el público. Esta plaza necesita una cubierta con urgencia. Estamos en el siglo XXI. Ya va siendo hora señora Ayuso. Póngalo en marcha de una vez.
Rafael Ortega
