El mundo de los toros no escapa del maleficio que azota a este país en todos los órdenes en que, lo que priva y vale es la locura al más alto nivel y, si eres maricón, como dije millones de veces, en cualquier parte del suelo patrio te ponen un monumento, que se lo digan a la maricona de Telecinco que, por ello, cobra más dinero que el más grande cirujano de España. Así ha derivado todo en los últimos veinte años y, las generaciones que vienen detrás de nosotros, es decir, nuestros hijos y nietos, sencillamente, que no les pase nada.

España está poseída por el diablo que no es otro que un indeseable como Pablo Iglesias que, como el mundo sabe, alienta a todo aquello que tenga que ver con la delincuencia, caso de los okupas y tres mil asuntos más obviando, naturalmente, todo el dinero recibido de Venezuela mientras que, los pobres diablos que le votaron siguen creyendo a este individuo. Siendo así, como decía, el mundo de los toros se suma a tales dislates, en este caso, en la persona de Enrique Ponce al que defendimos con ardor cuando se buscó esa novia que tiene; decíamos que, nada tiene que ver la vida privada de nadie con la profesional pero, el tal Ponce, nos ha hecho cambiar de opinión con sus absurdas decisiones que, él solo ha sido capaz de ridiculizarse.

Es tremendo, yo diría que penoso que un hombre como Enrique Ponce el que siempre se definió como un ser humano de principios, educado como él solo, respetuoso como el que más y, mira tú por donde, se le calienta la bragueta  y se convierte en un boludo más de los cientos de miles que pululan por España. Le criticábamos como profesional por aquello de matar burros desvalidos, especialmente de la casa de Juan Pedro Domecq pero, era una circunstancia natural por aquello de su profesión. Pero que ahora tengamos que criticarle por ser idiota en calidad de ser humano, eso nos llena de tristeza; vamos que, se ha comparado de la noche a la mañana con ese pobre hombre llamado Ortega Cano y mi pena es infinita. Siempre pensé que Ortega Cano había llegado al cenit de la idiotez y, como se demuestra, Enrique Ponce le está superando.

Claro que, lo que no sabe Enrique Ponce es todo el daño que le está haciendo al toreo con sus fotos de enamorado con Ana Soria que, en principio, si fuera una cuestión de alcoba sin que nadie se enterara, nadie nos rasgaríamos las vestiduras pero, como buen boludo, publica esas fotos en las redes sociales habiéndole perdido el respeto a la que fuera su esposa y, lo que es peor, a sus hijas. Tiran más dos tetas que dos carretas y, así se ha demostrado una vez más en un hombre que, inconscientemente, debería de saber que la maricona del canal antes citado, utiliza esas fotos del diestro con su enamorada para hacerle daño a la fiesta puesto que, dicha “loca” sabe que tiene en sus manos uno de los grandes medios de comunicación del aberrante país llamado España y lo aprovecha para hacer todo el daño que puede porque, las mariconas son impredecibles a la hora de hacer el daño, al igual que sus correligionarios políticos socialistas y comunistas.

Lo que no sabe Enrique Ponce es que, por regla natural, porque la naturaleza es sabia, dentro de pocos años verá cuernos por todos los lados y, que los vea, aunque sea pequeños en las plazas es lo más normal del mundo, lo peor será cuando los vea muy grandes y  no saber cómo lidiarlos. ¿Cómo un hombre de su categoría humana ha podido perder la cabeza? Claro que, al respecto, lo que haga con su vida privada me sudan los cojones, lo que me molesta mucho es que sus acciones deshonestas, vulgares y barriobajeras, algunas mariconas las utilicen para seguir haciéndole daño a la fiesta de los toros.

Todavía veremos más cosas y, siento asco cuando algunos famosos se quejan de que los medios se inmiscuyen en sus vidas privadas. ¡Y una mierda! Se meten porque ellos les dejan, les gusta ese romancillo y, al parecer, el que no sale en las redes sociales en las televisiones basura no existe. Todo está muy bien, pero luego que no se quejen de nada ni de nadie porque en los medios y en las redes, sale el que se muere por salir. ¿Ha visto alguien alguna vez a José Tomás con su novia en las redes sociales? Que responda el que tenga esa foto. Y digo todo esto porque se puede ser rico, famoso, hacendado, honrado y, a su vez, persona humilde que no protagoniza escándalos de ningún tipo. José Tomás es el ejemplo de lo que digo y, como el mundo sabe, es el torero más grande que ha dado la historia en los últimos cincuenta años pero, casualidades de la vida, dentro del traje de luces que se enfunda, hay un ser humano admirable.

La imagen que mostramos viene a definir lo que dice la sabiduría popular en la que, tiran más dos tetas que dos carretas.