Fumando espero, al hombre que yo quiero……Así lo cantaba Sara Montiel en su película La Violetera y, así lo repetimos nosotros los aficionados al respecto de Madrid; fumando espero…a la Ayuso que yo quiero.

Trataré de explicarme y, sin duda, tras lo contado no creo que nadie me tache de partidista y de tener animadversión contra nadie porque, ante todo, relatar los hechos consumados de los políticos, de una parte o de otra, no deja de ser un ejercicio de libertad, justamente la que todos añoramos respecto a los toros.

Es sabido, como miles de veces conté que, el partido socialista, en su conjunto, con las excepciones de rigor que todos conocemos, en la actualidad quieren destruir y erradicar para siempre la fiesta de los toros, todo un manantial de cultura pero que, esos ignorantes y analfabetos que nos rigen, hablarles de cultura es como si a mí me hablaran de galvanotecnia.

Dicho lo cual, todos sabemos que la comunidad de Madrid, en este caso la señora Díaz Ayuso no es sospechosa de atentar contra la tauromaquia pero, como dije en su momento, el día 15 de mayo, festividad de San Isidro, no podía, no debía quedarse sin toros en Madrid y, por lo que veo, fumando espero.

¿Cómo estarán siendo las negociaciones de la Comunidad con la empresa de Las Ventas? Nadie sabe nada pero, por el contrario, todos sabemos del gran ridículo que están haciendo ante los madrileños y, por consiguiente, con toda la afición de España. Si de entrada ya es un ridículo de pavor que se haya organizado una feria de San Isidro en Vistalegre, al margen, por supuesto, de la plaza de Las Ventas y de su propiedad como es la Comunidad Autónoma de Madrid.

Para colmo, este fin de semana hemos asistido a la feria de Leganés, se anuncian todos en Navalcarnero, Aranjuez, la citada Vistalegre y……..eso decimos todos, y……. Ridículo elevado al cubo por parte de los responsables de la Comunidad y de la propia empresa. No entendemos nada, pero sí todos tenemos una sensación de orfandad que nos hace llorar a lágrima viva.

Se celebró el festival del dos de mayo con seis mil personas, la prueba evidente de que se pueden dar toros en Madrid con todas las garantías del mundo. Por cierto, para que nadie se llame a engaño, tras la feria de San Isidro, pocas han sido las corridas que se ha congregado a seis mil personas. Siendo así, ¿dónde radica el problema? Si no se acelera el procedimiento para que haya toros en Madrid a la mayor brevedad posible, la señora Díaz Ayuso a la que apoyamos con toda la razón del mundo, de repente tendremos que exigirle responsabilidades al respecto. ¿Para qué sirve el Centro de Estudios Taurinos de la Comunidad de Madrid, teniendo al frente a Miguel Abellán?

¿Qué se cocinará entre bastidores? Se preguntan los aficionados de Madrid y, de España entera, por supuesto. ¿Se les habrá quemado el guiso de tanto hervir? ¿O quizás no ha hervido nada y se les ha quedado crudo? Mil preguntas sin respuesta alguna, lo que nos hace presagiar lo peor. Fumando espero, la fiesta que yo quiero…..Tras los cristales….alegres ventanales……Pero no vemos cartel alguno que nos pueda esperanzar por aquello de ver de nuevo toros en Madrid, en este caso, en la plaza de toros de Las Ventas.