El maestro Andrew Moore es un aficionado británico que, como sucediera con nuestra admirada Muriel Feiner, neoyorquina de pro, aficionada y gran persona, ambos son fotógrafos profesionales y, además, consagran su tiempo y talento a favor de la fiesta de los toros. Ellos, los personajes citados, son los que definen la grandeza de la mejor fiesta del mundo que, para mayor dicha, con su objetivo, la captan para la posteridad.

Dicho lo cual, hoy sentimos el inmenso gozo de que el maestro Andrew Moore nos haya abierto las puertas de su casa para que gocemos de su obra y desde nuestra humildad, divulguemos la misma que, llena de talento, verdad y encanto, solo privilegio de auténticos artistas que, pasado el tiempo quedarán enmarcados con la leyenda que se han forjado. Ese fue el caso de Alberto Korda cuando, en su momento, inmortalizó al Ché Guevara con la mítica foto que ha dado tres mil vueltas al mundo la que, por si misma, todos identificamos al citado Korda.

Como explico, es un inmenso honor el que Andrew Moore nos concede puesto que, de la mano de don Juan Lamarca ha llegado a nuestra morada informática para que sintamos su obra como nuestra. Es cierto que, en muchas ocasiones, debido a la premura informativa nos hemos “aprovechado” del maestro británico a la hora de insertar sus fotos, siempre haciendo referencia a su persona puesto que, lo demás sería una deshonra por nuestra parte.

Estamos, pues, que no cabemos de gozo ante el ofrecimiento que nos ha hecho este maestro de la cámara que, además de definirse como un aficionado ejemplar, es el vicepresidente del Club Taurino de Londres y pertenece al Círculo Bienvenida desde el día de su creación. Referentes todos de altísimo nivel que, como tales, vienen a demostrar la categoría humana del maestro Andrew Moore puesto que, la artística es la que nos muestra cada día con su objetivo.

Andrew Moore asiste a muchas ferias de España para inmortalizar los festejos que en cada lugar se celebran pero, es Madrid su “buque insignia” donde sus fotografías toman una relevancia desmesurada. Nuestra dicha no puede ser mayor porque, como el mundo sabe, vivimos muy alejados de Madrid, pero muy cerca del arte y de todos sus protagonistas y, que nadie tenga duda de que este británico ejemplar es todo un artista consumado. Es cierto que, en el ruedo, el torero tiene que poner su arte pero, aquello de captar en milésimas de segundo esa fotografía que estremece al mundo es privilegio de muy pocos afortunados y, Andrew Moore es un paradigma de todo lo dicho.

Publicamos, como bienvenida hacia este señor, varias de las fotos que nos ha enviado, entre ellas, la que dio la vuelta al mundo en el año 2017 en que, celebrándose una novillada con Diego Carretero, Leo Valadez y Pablo Aguado, vemos como todos los compañeros socorren al diestro sevillano tras su grave cogida en Madrid. Parece una foto normal pero, algo de magia y encanto tiene dicha imagen que, insisto, en su momento resultó ser un referente para todo el mundo taurino si de aficionados hablamos.