Colombia, como el resto de las países del mundo donde se celebran las corridas de toros, al respecto, están sufriendo una merma dramática en cuando al número de festejos y, lo que es peor, la cantidad enorme de plazas de toros que se han cerrado por culpa de las malditas gestiones políticas que, en vez de ayudar han destruido todo lo que han encontrado en su camino y, Colombia, como se demuestra no ha escapado de dicha catástrofe. Ya estuvo cerrada unos años la plaza de toros de Bogotá por culpa de su alcalde, el indeseable Gustavo Petro y, en el presente, dudo que se vuelva abrir porque Claudia López, la regidora colombiana tiene mucho veneno en su cuerpo. En Medellín ha sucedido otro tanto de lo mismo, así, un largo número de cosos del país andino que han cerrado sus puertas para siempre.

Dentro de ese terremoto que sacude a Colombia si de toros hablamos, nos queda Cali como consuelo y casi que con toda seguridad porque un español aventurero y enamorado de la fiesta de los toros, Alberto García, ha cogido las riendas de dicha plaza para dar una feria de altos vuelos; no en el número de festejos que antaño se celebraban pero si con el suficiente atractivo para que la gente acuda en masa al coso; ese es nuestro deseo, el resultado ya lo contaremos tras la feria puesto que, a tenor de cómo se desarrollan los hechos, si de toros conversamos no podemos echar las campanas al vuelo.

No es ninguna broma que Alberto García haya montado para Cali cuatro corridas de toros, dos novilladas y un festival, todo ello con la presencia de diestros de altísimo nivel, es el caso de Morante, Emilio de Justo, Roca Rey…..y si de toros mentamos, que los de Victorino Martín hagan acto de presencia en dicho ciclo caleño es una dicha inenarrable, como quizás lo sea los toros de César Rincón que, en las pocas corridas que ha lidiado por aquellas tierras, ha tenido éxitos incontestables.

Qué pena puesto que, como antes dije, Cali sigue siendo, junto a Manizales, el último bastión taurino de Colombia. Si echamos la vista atrás y analizamos lo que era Colombia hace muy pocos años, nos quedaríamos asombrados; aquello era un hervidero de festejos por todo el suelo colombiano, razón por la que allí nacieron y se hicieron toreros muchos chicos de allende. Figurémonos como era la cuestión que, César Rincón, el diestro bogotano que difundió el nombre de su país por todos los ruedos del mundo para lograr, como la gente sabe, el más grande entorchado de figura del toreo en los años noventa. La importancia de Colombia era altísima a cualquier nivel, César Rincón es el ejemplo delo que digo.

Ahora, los pobres toreros que quedan por allí, caso de Guerrita Chico entre otros, no tienen otra opción que optar por la retirada. De igual modo, Sebastián Ritter, un torero de enorme calidad sigue tratando de abrirse paso en España y, para su fortuna, hasta está programado en la feria caleña. Si el maestro Pepe Cáceres levantara la cabeza y contemplara en qué ha quedado la fiesta taurina en el país que le vio nacer, sin duda, moría de nuevo, pero en esta ocasión de pena y de desolación.

Otro colombiano, Gabriel García Márquez, sin pretenderlo, en una de sus novelas nos daba la pauta de lo que está sucediendo en el mundo de los toros. CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA y, es el caso de nuestra fiesta que tanto en Colombia, Perú, Ecuador, Venezuela, México, e incluso España, todos tenemos la espada de Damocles encima, a la espera, sencillamente, de recibir el cuchillazo eterno que nos llevará al otro mundo. Así ha quedado la fiesta de los toros que, entre todos la mataron y ella sola se murió.

De momento nos queda, como ilusión, la retrasmisión por parte de Movistar de dos corridas de toros desde Cali que, a no dudar nos llenan de ilusiones, festejos que se darán cita los días 28 y 30 de diciembre a las 22 horas de España.

Día 28: Corrida de toros con ejemplares de Guachicono para los diestros Morante de la Puebla, Emilio de Justo y Sebastián Ritter.

Día 30: Corrida de toros con reses de Victorino Martin en un sensacional mano a mano para Luis Bolívar y Emilio de Justo.