En Azpeitia los toros de Ana Romero han encontrado un bastión, una simbiosis, un pequeño romance, porque ya son 8 temporadas consecutivas que los toros grises se recorren de punta a punta el país, para saltar al ruedo vasco y dar muestras de su casta y bravura. Varios premios son testigos de mis palabras, aunque el mejor reconocimiento para un ganadero sea que el aficionado salga contento y haya disfrutado, los premios son muescas en la carrera para atestiguar con metal lo que algunas mentas olvidan muy rápido.

El próximo 31 de julio los grises volverán abrir la feria de Azpeitia y a derrochar bravura delante de los toreros que pondrán en la mesa su tauromaquia para llevarse dos orejas que les abra la puerta grande, Daniel Luque, David de Miranda y Adrien Salenc.