Astérix y Obélix se han quedado huérfanos. Sobre todo Obélix, el chouchou, el preferido, de Albert Uderzo, creador junto con René Goscinny de los dos galos más famosos de la historia y del planeta. El dibujante ha fallecido el martes 24 de marzo en su casa en Neully sur Seine, un pueblito cerca de Paris, a los 92 años, de “una crisis cardiaca sin relación con el coronavirus”, se ha visto obligada a precisar su familia en estos tiempos de epidemia mundial.
Albert Uderzo hizo muchos guiños a la tauromaquia en sus emblemáticos comics, e imprimió con su personalidad imágenes sobre la corrida, e incluso el mundo del arte a cuerpo limpio, algo curioso, cuanto menos, y que seguramente imprimió de amor por la fiesta algún lector.
