La Navidad se celebra para conmemorar el nacimiento del niño Jesús.

Son días de celebración, reuniones con amigos, familia, cenas, comidas, et.

La Navidad para muchos entre los que me incluyo es alegría y tristeza. Alegría de estar con las personas que quieres y te quieren, tristeza porque muchos seres queridos ya no están.

Si pudiera celebrar la navidad a mi antojo sería muy selectivo con quien como y con quién ceno, con quién me apetece reír, compartir, disfrutar, recordar, etc .

Pero cuando formas una familia esa familia tiene también otra familia de siempre y aunque no todos son de nuestro agrado, seamos sinceros, tenemos que hacer de tripas corazones y estar y compartir comida y cena con personas con las que no nos sentimos del todo cómodos, lo hacemos porque es ley de vida compartir nuestras vidas con la familia de nuestra mujer o nuestro marido.

Y lo hacemos por educación y sobre todo por respeto a la persona que quieres, amas y vives todos los días de tú vida con ella.

Me duelen los abrazos falsos y los te quiero de mentira que ese día algun@s se dicen, los brindis mentirosos, todo el mundo parece quererse y a lo mejor están meses y meses sin llamarse.

«Ojo», con esto no quiero generalizar, pero si puntualizar.

No todos son abrazos falsos ni brindis de mentira, también hay amor puro entre hijos, padres, abuelos y nietos, esas reuniones como la vida misma llevan un cóctel de todo, bueno, regular y malo.

La Navidad que yo siento es colorido, luz en las casas y en las calles, son figuras de Belenes, es la sonrisa en la cara de los niños, son los puestecitos de venta, son las cartas a los reyes magos, es el recuerdo de otro tiempo donde se celebraba lo mismo, es el espíritu de mis padres aunque ya no estén cuando ceno en la nochebuena o nochevieja, es el recuerdo aunque sea fugaz de mi hermana Rosa (D.E.P.).

La Navidad es también la señal de que se va acabando un año y se acerca otro.

Para mí también la Navidad es pasear por el centro agarrado de tu mano Marisol, viendo puestos y tomando chocolate con churros.

La Navidad es una mezcla de sentimientos, donde también aparece la cara amarga y la tristeza, amigos que se fueron, padres, animales de compañía que eran miembros de la familia, seres queridos que no se reunirán con nosotros en estos días a compartir mesa, donde hablábamos de la vida esa que es tan bonita como dura.

La Navidad es también el recuerdo de muchos sitios, de calles que pisamos, de barrios y vida vivida, la Navidad siempre vivirá en todas las generaciones aunque ya sea otra Navidad totalmente distinta a las navidades de antes.

Ayer paseando con mi esposa vimos a una persona tumbada en un banco tapada con un cacho de trapo.

¿Qué pensará esa persona de la Navidad?.

La Navidad tiene muchos disfraces.

La Navidad, tiene más de un papá Noel y más de tres Reyes magos.

La Navidad es única, la navidad es lo que tú sientes en tu corazón.

Brindo porque esta Navidad sea la mejor de todas.

Brindaré por mi familia, por mis amigos los que están y por los que se fueron.

Está Navidad brindaré por ti que me lees.

«Salud» para todos.

Julián Maestro, torero