El campo en invierno muestra su rigor y aunque en Valencia nos encontrábamos en alerta amarilla por las circunstancias meteorológicas, desde la Finca el Campanar pudimos disfrutar de una interesante tertulia con Gregorio de Jesús, quien se expresa con la seguridad, la claridad y el convencimiento de quien es un experto en la materia objeto de esta conversación.
¿Qué tal te encuentras, cómo va la recuperación de esa pierna?
Estoy perfectamente, al cien por cien recuperado, a tope de ilusión y con muchas ganas de trabajar en estos tiempos tan complicados.
El abanico de tu empresa está formado por muchas varillas, desde la ganadería, los festejos populares, el apoderamiento del novillero Jorge Martínez, las pujas por diversas plazas de toros y ahora la sorprendente incorporación del espectáculo cómico taurino el Popeye torero. ¿Cómo lo estás enfocando?
Lo que yo quiero es hacer muchas cosas por la Tauromaquia, se trata de devolver un poco lo que los toros me han dado a mí, y mucho más ahora en estos tiempos difíciles. No puede haber mejor momento para no dejarla caer e implicarse en todos los sectores en los que uno pueda ser de ayuda. La cuestión no es abarcar por abarcar sino, por ejemplo, mi empresa se está centrando en los pueblos, donde hace tanta falta que los toros vuelvan. Y de alguna manera también se lo debía al toreo cómico porque es ahí donde me he criado y me he hecho mayor. Mi padre lo ha llevado cincuenta años y de ahí hemos vivido. También es importante en este momento que estoy apoderando a quien es futuro de la Tauromaquia, por todos estos caminos en por donde voy.
¿Va a ser que al final las plazas de tercera serán las de categoría especial?
Ahora mismo resulta necesario devolver la Tauromaquia a sus raíces, al pueblo, y cuando hablamos del pueblo quiero decir a los pueblos. En unos tiempos en que los pliegos se han hecho tan selectivos, esta es la única manera que tenemos para reinventarnos y aportar nuestras ideas, porque desgraciadamente no se nos permite entrar en los otros circuitos. A partir de ahí hay que empezar desde abajo y hacer las cosas muy bien esperando que haya suerte para subir escalones que nos permitan alcanzar cotas más altas.
Hubo un momento en el que el toreo cómico ocupaba un puntal importante en la Tauromaquia y gracias a él, y a su parte seria, salieron muchas figuras del toreo, ¿cómo pudo ser que se le diera de lado?
Lo que sucedió es que comenzaron a surgir otro tipo de festejos populares como fueron los espectáculos de recortadores, el Gran Prix o el Humor Amarillo, que eran novedad de cara a las empresas. También pasaba que el formato del toreo cómico era bastante similar en todas las compañías y se quemó de ver siempre lo mismo, lo que provocó que la gente dejase de ir después de toda una vida. Además, para el empresario estos nuevos espectáculos eran muchísimo más baratos, ten en cuenta que el toreo cómico musical está considerado como un festejo mayor en cuanto al gravamen de impuestos se refiere, porque en él participan veintidós personas de las que doce son profesionales taurinos que cotizan a la Seguridad Social.
Otra causa fundamental es que ahora mismo hay muchísima gente que vive de las subvenciones, como forma de vida y de negocio, creando plataformas, recibiendo dinero del estado, y desde ellas defienden a morir una serie de principios, aunque no crean lo que predican, y salieron de defensores humanos de los enanitos, por supuesto sin contar con ellos para nada, y empezaron a divulgar que si este tipo de espectáculos herían la sensibilidad de las personas de corta estatura, que si se estaban aprovechando, y a partir de ahí dejaron sin trabajo a los enanitos. Para no perder las subvenciones, se dedican a enviar cartas a los ayuntamientos y cuando un empresario anuncia este espectáculo, y el alcalde recibe cien amenazas por parte de estos grupos, este pide dejarlo pasar para evitar problemas y conflictos. Estamos en una época en la que estamos viendo hechos y sucesos que nunca pensamos que íbamos a ver. Todos los estamos dejando pasar para evitar problemas y poco a poco están terminando con nuestras raíces, con nuestras tradiciones y con nuestra forma de ver la vida, por no ser valientes con este tipo de gente, que les han buscado una ruina a los pequeños. Yo lo sé porque me he criado con ellos y aquí en mi pueblo viven cinco de la época de mi padre que afortunadamente pudieron jubilarse como toreros cómicos antes de que llegase esta mala situación, y tienen su casita y su paga para vivir dignamente gracias a que cotizaron por el toreo cómico. Ahora los pequeños no quieren ser una carga para el Estado, quieren trabajar, cotizar y pagar sus impuestos, siendo el toreo cómico una buena forma para poder vivir. Sin embargo, sus “defensores” lo que han hecho es buscarles una verdadera ruina, porque ahora se dedican muchos de ellos a repartir propaganda, o por los semáforos. Les han quitado el pan y no les han dado una solución alternativa, más que fiestas privadas, discotecas o despedidas de soltero y lo están pasando muy mal, porque les han quitado hasta el paro y la Seguridad Social.
El vicepresidente del Gobierno está impulsando una iniciativa para prohibir definitivamente estos espectáculos, si tuvieras ocasión de hablar con él, ¿qué le pedirías?
Que hablase con la parte implicada, que son los pequeños que se dedican al toreo cómico. Supongo que también habrá enanitos cuya vocación sea otra diferente a la de la Tauromaquia o el artisteo, y que todos tengan libertad para decidir sobre su vida. También para los que quieren ser toreros. Por eso le pediría que tuviese una reunión con ellos, que los escuchara y a lo mejor al terminar lo viese de otra manera, pero en este momento la propaganda ideológica está haciendo mucho daño y creo que los taurinos ya nos hemos quitado las vendas de los ojos, hemos dado un paso adelante y se está viendo que cada día hay más declaraciones de figuras del toreo y de artistas denunciando claramente este tipo de política.
¿Cómo ves el futuro cercano?
Es un camino tortuoso, pero ya verás cómo seguro que pronto volveremos, seguro que para este verano habrá festejos funcionando. No será un caudal de actuaciones, pero empezaremos poco a poco. Si salen diez o quince, y gracias a ello estas personas pueden cotizar a la Seguridad Social, me llevaré una gran satisfacción.
Gregorio de Jesús ha aprovechado este tiempo de cambios para tomar decisiones, confiando en que su apuesta por el espectáculo del Popeye Torero y sus Enanitos Marineros tendrá buena cabida en el actual panorama taurino, volviendo el toreo cómico a ser base de la Tauromaquia y el primer paso de muchos niños que se harán aficionados a los toros.
José Luis Barrachina Susarte
En la foto que mostramos vemos a Gregorio de Jesús en hombros y, el costalero no es otro que el novillero Alfredo Bernabéu.
