• Los pasajes más destacados estuvieron en el capote de Chacón, el comienzo de muleta de Castella, y el buen juego de los astados en varas.
  • Pepe Moral tuvo momentos toreros en su tercero.

Algo más de media entrada adornaba los tendidos de la maestranza. Un domingo que pasa a ser “de resaca” por esos cambios festivos de estos últimos años, y que propician que ayer se apagara el alumbrado de la feria. Por lo tanto, domingo de resaca. Hubo tiempos en que los tendidos con la corrida de Miura se llenaban hasta la bandera, hoy no fue así, la gente no tiene la misma afición, les gusta más el “postureo”, que en mi tierra lo hay de sobra, incluso exportamos algo al extranjero.

Hoy era el último día de una feria de Sevilla, que ha colocado a Pablo Aguado como figura del “encaste domecq” porque no va a salir de ese encaste, como todos lo que llegan arriba. Una feria que se ha visto algunos toros interesantes, pero la gran mayoría han sido una simple comparsa. Hoy era otra cosa, hoy había toros con seriedad, con mirada profunda, con kilos sin estar atacados, y con sus defectos.

Hoy a los toros se les ha picado, tanto como a tres corridas del encaste domecq juntos. Algunos muy mal, como el picador “Ruiz Espartaco” que ya por edad, debería dejar paso a otros jovenes, para regenerar un poquito el escalafón de picadores, aunque para ser honestos no es el único que tiene que dejar el caballo, hay unos cuantos.

Castella había despertado mucha expectación por presentarse voluntariamente con la corrida de Miura. Un gesto que le honra, porque lo que antes era normal hoy es efímero y la mayoría de la prensa, calla y otorga. Algo que nos emocionó a los aficionados, por su actitud, y sobre todo porque es lo que quiere la gente, ver variedad, que por otro lado aportaría mucha frescura en la fiesta. Poco hizo Castella en su tarde, nuevo en esto de torear toros con defectos, con genio, y encastados. Una tarde que pasó sin pena ni gloria, y esperemos que no lo apunte en sus memorias como una gesta. No hizo nada, salvo poner a su toro 3 puyazos, cuando a los de domecq los deja crudos. Estos toros que piden el carnet, se llevaron por delante a la figura. Admito que no eran toros de triunfo, anclados de remos, de vuelta rápida, aspereza en su embestida y algo sosos, pero tenían un pizca más de lo que nos hizo ver. Lo más destacado fue su comienzo al 4 de la tarde, anclado sobre las zapatillas y con la mano sujetando las tablas, muy quieto y despacio toreo, luego todo lo demás fue enganchones… y tal. Silenciado y pitado.

Octavio Chacón ha estado soberbió con el capote en sus dos toros, en especial al quinto de la tarde. Para los que dicen que Octavio solo torea con el capote “para atrás” hoy les ha dado una lección, unas verónicas muy templadas y ajustadas, sacando el toro hacia los medios y abrochando la embestida en la cintura con una media de “ole”.  Todo a un toro de Miura, si fuera Morante, le sacarían 30 titulares y dos menciones especiales, al ser Chacón un torero humilde, pocos repararan en evidente tanda de verónicas. Con la muleta Chacón estuvo voluntarioso, seguro, tranquilo ante dos oponentes de condiciones similares, y con los que por momentos no les dio el sitio adecuado. En ningún momento le regalaron nada sus toros, y el torero estuvo perfecto en la colocación y zafándose de los «gañafones» de sus oponentes, que le sorprendían con hachazos en cada serie.Poco más pudo hacer ante toros que no acabaron de romper a embestir, y que aprendieron muy rápido, pero que sobretodo carecieron de emoción. En su primero falló con los aceros. Dos ovaciones.

Pepe Moral pasó sin hacer ruido por la feria de abril 2019. Tuvo el toro más potable con la muleta,-3 de la tarde-  con el que el torero Sevillano hizo tocar la música, se entregó el toro hasta que se cansó por la falta de mando, una faena que fue de más a menos, en la que acabó sufriendo para dar muerte al toro por la mala ejecución con los aceros. El sexto fue devuelto a los corrales por falta de fuerzas. Con el Bis, un toro más fino, no le quiso ni ver con la muleta, que a la postre, fue un toro con más recorrido de lo que se preveía pero con poca clase. Tarde gris en conjunto para el torero de los Palacios, que le espera una exigente feria de San Isidro. Necesitamos recuperar la mejor versión de Pepe Moral por el bien de tauromaquia.  Silencio en ambos.

Por Oscar de la Puente