-Según noticias la van a rehabilitar con más de 20 millones de euros después de 25 años de negligencia.
-La última corrida se celebró el 21 de septiembre de 2007 con “Jesulín”, 1 oreja, El Cordobés, 3 orejas y Rivera Ordóñez, 2 orejas. Dos tercios de plaza.
–El año 2011 escribí, para el “Club Taurino de Pamplona”, el artículo REQUIEM…con motivo de escandalizarme al conocer la plaza de toros “Buenavista” de Oviedo (Bien de Interés Cultural) y su cruel abandono histórico… y reciente ¡Qué quedará hoy! Un bosque de árboles de ocho metros…y sombra.
Malo es que se cierre una plaza…Ocurrió con la plaza Asdrúbal de Cádiz, cerrada en el 67 y derribada en el 76. Aunque esta se fue aborreciendo porque raro es el que no tuvo algún familiar fusilado en sus paredones cuando La Sublevación del 36…y no querían recordar.
Se derribó en el 68 la plaza “Santa Margarita” de La Coruña y “El Coliseo, estrenado por el 91…ya no ha sido lo mismo ni de cerca. Estas cosas.
VAMOS CON “EL REQUIEM” del 2011.
En la pasada primavera, con temperaturas de verano, pasé diez días inolvidables haciendo comedias en Oviedo. En la Capital del Principado se ha rodado la mayor parte de “Los muertos no se tocan, nene”, película basada en la novela del mismo título que escribió Rafael Azcona e impidieron filmar, en épocas de holocausto, los guardianes de la moral y esbirros de la censura.
Como es mi costumbre, en ciudad o pueblo que visito, me acerqué a conocer la plaza de toros de Buenavista, inaugurada por Frascuelo en 1889 con toros del Duque de Veragua y con aforo de unas 10.000 localidades.
Las corridas principales de Oviedo se daban en San Mateo y en La Ascensión. Nunca contaron como feria importante y será difícil que vuelvan los carteles de toros pues el edificio se clausuró, y abandonó a la crueldad del tiempo, por deficiencias en la estructura, especialmente en el graderío alto.
El inmueble está en un altozano urbano con frondosos y vetustos árboles y el entorno es un pequeño parque, con cuidado césped, que linda con la calle Juan Belmonte. Las fachadas en lamentable abandono y el interior mucho más con corrales y chiqueros bien distribuidos al amparo y la impiedad del olvido.
¡Menos mal que la plaza está declarada bien de interés cultural!
El edificio es un polígono irregular, mudéjar y de ladrillo, con 16 módulos con 5 arcos de medio punto en la base y cinco con balcón en el primer piso.
La puerta principal es preciosa con arcos de herradura de dos pisos.
Amplios tendidos y palcos con parte cubierta con bovedilla de ladrillo y teja árabe. Espacioso callejón y en los muros interiores de la planta baja numerosos hierros ganaderos y pinturas murales que representan a Espartaco, Joselito, Roberto Domínguez, Julio Robles toreando, El Zamorano de novillero y los modestos toreros locales Paco Valdés y Pepe Rosales.
Paco Valdés y Manuel San Román, torearon algunos festivales en Oviedo, Gijón y Mieres y fundaron a principios de los cincuenta el club taurino ovetense. Fue el primer presidente San Román, que con Armando Grande dio en Oviedo la noticia de la muerte de Manolete, en la emisora local FET 22, y mantuvieron hasta 1955 la sección taurina “Redondel”.
Rosales alternó en Buenavista, mediados los cincuenta, con Paco Corpas y Victoriano Valencia en una novillada del doctor Zúmel.
Me emocionó una placa bajo el hierro de su ganadería: “A la memoria de D. MANUEL SAN ROMÁN DE VALDÉS, ganadero de reses bravas e ilustre ovetense (1924-2004). Principal artífice de la importancia de la fiesta de toros en Asturias. En nombre de los aficionados, EL AYUNTAMIENTO DE OVIEDO. 21 DE SEPTIEMBRE DE 2005”.
¡Si levantara la cabeza Manolo San Román!
Fue una de “les últimes alegríes” de la jornada ya que el ganadero dejó historia sólida como empresario en Calahorra y atendió con cariño a toreros y aficionados de esta tierra en su dehesa salmantina de San Pedro de Rozados.
El conserje de la plaza, José Luis Fernández González, es empleado municipal y mostró las dependencias con nostalgia de lo que fueron. En el patio de cuadrillas quedan unas estancias para los servicios veterinarios municipales.
José Luis ya no sufre viendo hierba en el ruedo, la pintura desconchada, los corrales medio derrumbados, las barreras levantadas o goteras en los tejadillos. Sabe “qu´enxamás” habrá toros y que es inútil luchar contra el destino: El que nace lechón muere cochino. Pero nos explica, “dende la pena y la tristura”, cómo funcionó el sistema de desenjaule y apartado que no olvidará “el restu de la so vida”.
En el 2007 hubo toros el 20 de mayo con el rejoneador Álvaro Montes, Rivera Ordóñez y Cayetano. Los tres salieron a hombros, se cubrieron dos tercios de plaza y el Ayuntamiento regaló 2.700 localidades.
El último festejo, se celebró el 21 de septiembre con Jesulín de Ubrique, que obtuvo una oreja, y Rivera Ordóñez y El Cordobés que sumaron 5 orejas, petición de rabo y salieron a hombros. Toros vulgares de Peralta.
Se cubrió en dos tercios la plaza y la gente salió entusiasmada: “¡Qué corrida! Y encima vinimos de magullu pues invitonos el Ayuntamiento”.
El 30 de marzo siguiente la plaza quedó clausurada.
El coso ha sufrido “agresiones” desde casi su nacimiento. En 1917 acabó en ruina y lo reinauguraron Rafael “El Gallo” y Gaona al año siguiente. Un incendio en el 32 se cargó los pisos altos y se reconstruyó con transformaciones en el 34. Pero la revolución de ese año y los combates de la sublevación militar de 1936 lo destrozaron de nuevo hasta que en 1944 lo adquiere el Ayuntamiento ovetense por 350.000 pesetas para rehabilitarlo en 1957.
Antonio Bienvenida, Luis Miguel Dominguín y Victoriano Valencia, con toros de Palha, la reestrenan al año siguiente pero en el 73 algún concejal ya quiere destinar el solar a viviendas de lujo y otros servicios.
“L´empeñu” de la Federación Taurina Asturiana y un sector de prensa la salvan y se refuerza la parte alta. Se dieron toros, conciertos…pero el ambiente que se respira en Oviedo es que “la lexendaria plaza ya morrió”.
El eximio filósofo y profesor Gustavo Bueno, riojano y asentado en Oviedo, que visitó en el hotel al director de la película con el “tema” de Rafael Azcona, nos cuenta que ha dado un par de conferencias en el club taurino local. En la calle San Bernabé disfrutamos, de forma anónima, en el bar “El Burladero” con excelente decoración taurina de lámparas, fotografías históricas y actuales de lidiadores y alguna vitrina con ternos, objetos y trebejos toreros.
¡Qué lujo de local, con gran servicio hostelero, para una gran ciudad sin toros!
Pedro Mari Azofra.
PIES DE FOTOS:
Portada principal y exterior de “Bellavista” y conserje en el año 2011. La arena del ruedo convertida en paciones para el ganadu y nuvielles todo el añu ¡Qué pena!