Esta semana han visto la luz un San Isidro más o un san Isidro menos, según con los ojos que se mire. Esta semana el Napoleón del toreo ha sacado de su bicornio otras de sus obras de producción artística.

Vamos a ir analizando siempre desde mi imparcial punto de vista como veo yo los carteles presentados por Simón Casas, el Napoleón del toreo, a primera vista estamos ante un buen San Isidro, ya que creo que hay carteles en los que de una vez se hace justicia con algunos toreros que desde hace años están en derecho ganado en el ruedo de tener un puesto en la principal feria taurina del mundo.

Esta isidrada 2018 con ese homenaje a Iván Fandiño con la ilustración de su cartelera, viene con 27 corridas de toros, 4 corridas del bello arte del rejoneo y 3 novilladas con picadores. Además de los de siempre los que no deben de fallar en los carteles de grandes ferias yo destacaría unos cuantos nombres propios de estos carteles, el primero el de Juan José Padilla, el valiente torero de Jerez se enfrenta no a un San Isidro mas si no a su ultimo San Isidro, su ultimo paseíllo en las ventas, su ultima sensación de ese miedo que produce esa plaza que te llena de gloria o te manda a las cloacas del toreo, siguiendo con los veteranos me ilusiona el regreso a San Isidro de Finito de Córdoba, que creo que ha alcanzado tal nivel de madurez en su tan fina tauromaquia que es el momento justo de expresarlos en el ruedo venteño con los toros de Juan Pedro, y dentro de los veteranos creo que me falta Juan Mora otro torero de un gusto exquisito muy del gusto de los que cada mayo ocupan su localidades en la plaza de la calle Alcalá.

Pero creo que Simón Casas ha hecho algo de justicia en estos carteles me ilusiona la vuelta de Emilio de Justo diez años después de su último paseíllo en Las Ventas, era de justicia que esté en este San Isidro. Pero si algo de verdad me atrae de estos carteles que de una vez se hace verdadera justicia con un joven torero de Prado del Rey un  pueblo precioso en plena ruta de los pueblos blancos de Cádiz, y que desde que tomó la alternativa en El Puerto de Santa María,  no ha dejado de luchar por buscar ese hueco que él se merece en la tauromaquia actual, cientos de corridas toreadas en Perú, mas varias temporadas toreando lo que nadie quería en este nuestro país y madre de la tauromaquia este joven torero en cualquier pueblo eso que he dicho lo que nadie quería, esto le valió para que Antonio Caba un torero del campo de Gibraltar se fijara en él y comenzara una lucha juntos, rápido esta unión dio su fruto y se le abrieron las puerta de Francia y ahora se le abre la puerta de hacer el paseíllo con la de Santillo en San Isidro y de seguro se le abrira la puerta de la gloria del torero a Octavio Chacón.

Son muchas tardes, muchos días, muchas ganaderías, muchos toreros, un nuevo invento 9 naciones, muchas ilusiones, mucho miedo y mucho torero, deseo de triunfo y la gloria de los máximos toreros posibles, que embista la mayoría de los toros, pero si algo deseo lo he ido diciendo poco a poco, deseo la mejor despedida de Juan José Padilla, el mejor regreso de Finito de Córdoba y el mayor triunfo para Emilio de justo y Octavio Chacón.