Me parece estupendo que D. Victorino Martin como presidente de la Fundación del Toro de Lidia, se haya presentado para defender la tauromaquia ante el senado, algunos lo tildan de hito histórico, tal vez incluso sea cierto, pero muchas veces no nos damos cuenta, que la tauromaquia no necesita tanta defensa del exterior como nos hacen creer, y lo que necesita es más “mantenimiento interno”.

La fundación del toro de lidia nació para la defensa de la tauromaquia de los ataques externos, y le pongo más énfasis en “ataques externos” porque de los ataques internos no quieren saber nada, no en vano se financia de aportaciones tanto de empresarios, toreros, ganaderos y los más que afamados amigos.

Ataques externos, por desgracia son inevitables, siempre la tauromaquia va a tener enemigos, es inevitable, es como la vida misma, lo que pasa que la fundación solo trata los que cree que les va a dar más repercusión, por desgracia aunque todos los ataques son iguales, no todos tienen la misma respuesta.

La Fundación del toro de Lidia nació con la idiosincrasia “Sin ánimo de Lucro” pero la verdad que eso es poco creíble, y que denota un cierto grado de falsedad, tampoco jamás ha presentado sus cuentas, ingresos y gastos, no están a disposición para los “amigos” de la fundación… se sabe, y es de ámbito general, que la fundación dispone de una cantidad indecente de dinero por temporada, sumas que vienen de diferentes frentes, toreros, empresarios, ganaderos, amigos, y ahora también la organización de festivales, han organizado dos festivales, uno por la memoria de Víctor Barrio, que se recaudó cerca de 400.000 euros, y otro por el nuevo he inventado “día de la tauromaquia”, que recaudaron cerca de 250.000 euros. Mucho dinero más el que no se hace público sin saber dónde va a parar… siempre se dice lo mismo, frase ya que cansa y fatiga, se destina a la promoción y defensa de la tauromaquia.

Hasta hace unas temporadas, no hacía falta tanta defensa de la tauromaquia, tal vez instaurar el miedo, y darle mucha voz a ciertas frases malévolas, crean el caldo de cultivo idóneo para que se apropien de la defensa de la tauromaquia, en defensa de sus intereses.

La promoción de la tauromaquia se base todo el rato en darse autobombo, autopromoción  y creación de delegaciones en provincias, como si con eso bastara para captar nuevos aficionados, y nuevos espectadores.

¿Porque la fundación no quiere involucrarse en los males taurino?

Muy fácil, porque saben perfectamente que sacan más dejándolos de lado, no se pueden poner en contra de nadie, ya tienen un enemigo creado, que es las personas que critiquen del exterior la tauromaquia…  pero para nada quieren involucrarse en la integridad del toro, en la falta de pagos de ciertos empresarios, en la falta de variedad en la fiesta, en la falta de regeneración de aficionados, tal vez, si siguen defendiendo lo del exterior, cuando se quieran dar cuenta no tienen nada que defender, porque esta tauromaquia estará tan denostada, dañada, lesionada, fatigada, que no habrá nada por lo que luchar.

Hay muchas preguntas que no tienen la respuesta, ellos tampoco quieren contestar… ni mostrar claridad, antes de apostar por algo intangible, y que no se demuestra, exige transparencia.

 

Por Juanje Herrero