Una España -o lo que quede de ella- sin toros
Domingo Dominguín, el pequeño de la dinastía, fue un tipo extraordinario del cual me he declarado siempre admirador. Hace ya más de 60 años sentenció al toreo: “Los toros son un espectáculo maravilloso en manos de mediocres, en tanto el futbol es un deporte mediocre en manos de gente brillante”. En aquel momento era, sin