• La media de precio de las entradas asciende a la friolera cantidad de 207 euros.
  • Mientras que la empresa regala cerca de 1000 abonos el resto de las localidades suben de precio para recuperar la perdida. 

La plaza más antigua del mundo pasa por uno de sus peores momentos de la historia, la gerencia de los mexicanos de Casa Toreros sumada al pésimo trabajo de J.M Roca Rey está tirando por tierra cerca de 3 siglos de tradición. Cada corrida tanto de la presente temporada como las pasadas están bajo sospechas y son motivos de polémica.

Estamos hablando no solo de la plaza más antigua de América, también de uno de las principales ferias del conteniente que daba cache al Perú taurino. Grandes momentos de gloria vividas en su albero, dentro de sus muros, donde grandes figuras de todos los tiempos han visitado sus tierras para dejar su personalidad implementada en faenas para el recuerdo.

Hoy en día las corridas se han convertido en novilladas, y las novilladas en becerradas, el serrucho sobrevuela cada tarde en el tendido. Una ofensa que las autoridades pertinentes como el juez de plaza Martin Campos se la pasan por el arco del triunfo, sus maneras en sus primeras temporada dejan mucho que desear, sin integridad, sin honestidad, sin ética ni moral. Que mala suerte ha tenido Lima con la nueva adquisición por parte de Casa Toreros, porque que nadie les engañe, ese hombre está puesto a dedo por la empresa, para cooperar en las fechorías llevadas a cabo cada tarde.

No nos tenemos que olvidar de una cosa, Acho y su feria del señor de los milagros es la más cara del mundo. El precio desorbitado de las entradas, hace que muchos aficionados se sacrifiquen durante el año para pagarse su abono. Estamos hablando de que la entrada más cara, una sola entrada para una corrida, cuesta  778,48 euros, algo totalmente desproporcionado e insultante. Más caro que cualquier abono –normal-  de cualquier feria de primera en Europa. El abono más caro cuesta la friolera cifra de 2529,52 euros, lo que costaría en España el abono de San Isidro y la feria de Abril, es decir unas 44 corridas, en detrimento de 5 corridas de toros que dispone la feria de los milagros de Acho. Casi es un milagro acceder a un abono. La media del precio de las entradas en lima es de 206,95 por corrida. Algo inadmisible dado el trapío de las reses obtenidas. Están encareciendo las fiestas para que la gente humilde y trabajadora no pueda acceder, haciendo de la plaza su cortijo privado. Una auténtica vergüenza.

Lo que muchos aficionados no saben es que casa toreros regala la friolera de más de 1000 abonos a gente afín a la empresa, que es la que se encarga de increpar a los buenos aficionados. Ése regalo por parte de casa toreros y más especialmente por parte de Pablito “Repeinado” Moreno se lo hacen a personas de toda clase, pagan el favor con silencio, y hablo desde la más pura verdad. Lo que implementaría el precio para el resto de los aficionados. Es decir, que la gran mayoría paga más caro por el resto considerados «VIP».

Los culpables son Pablo Moreno, un empresario sin ninguna idea de la tauromaquia, que su único interés es ser conocido, y le den palmaditas en la espalda, siendo el hazmerreír de los críticos españoles, por su fanfarronería y su poca cultura taurina, y tales palabras  no salen de mi boca, sino de dos de los críticos más conocidos del mundo taurino. Pablito “Repeinado” Moreno es un lastre para la tauromaquia, para Acho, para la integridad, para la cultura taurina y todo lo que tanto hemos defendido muchos aficionados en todos los tiempos. Un insulto que este tipo de empresarios entren en la tauromaquia e incluso se hagan ganaderos.

La feria más cara del mundo merece tener un toro con trapío, sin pasar por el serrucho cada domingo, porque lo que hacen ustedes, todo el clan que comanda Casa toreros es robar, estafar a todos los aficionados que pasan por taquilla para ver sus charlotadas.

Por Juanje Herrero