La pasada feria de otoño, el productor francés Simón Casas, gerente de la plaza de toros de Madrid, se sacó de la manga un bombo para sortear entre los elegidos los carteles de la feria otoñal feria madrileña. El Bombo dio para correr chorros de tinta y poner millones de cosas negro sobre blanco, pero la apuesta al parecer le salió bien y Simón dijo que buscaría la fórmula para sacar de nuevo el bombo pero esta vez para San Isidro.
Pero ese bombo que Casas anuncio sacar está haciendo moverse a lo que se llama Sistema, el primero fue El Juli, la figura del torero de San Blas lo dejo clarito “Poner en una rifa a una persona de carne y hueso que se juega la vida en una plaza no creo que sea lo más lógico” El torero ha dicho que un empresario debe “crear los carteles, y no sortearlos” con estas afirmaciones dejan muy clara su postura El Juli.
Otra parte de eso llamado “Sistema” es el empresario salmantino Antonio García Jiménez, vamos Toño Matilla, que según publicada días atrás El Español, el empresario, apoderado y ganadero Toño Matilla había abandonado la junta directiva de Anoet, la patronal de los empresarios taurinos, el motivo defender los intereses de sus toreros ante el bombo en el próximo San Isidro, recordar que Matilla lleva a Manzanares, Morante y El Fandi.
Hasta aquí parece que los estamentos “El Sistema” no está por la labor de de mas bombo ni mas sorteo de los puesto del serial madrileño, por eso Donde dije digo, digo Diego y si Diego ese Diego que entro en el bombo de Otoño, si ese Diego que corto tres orejas si ese Diego que salió por la puerta grande si ese Diego que fue el ausente de San Isidro y que El Sistema le ha intentado pisar el cuello por su independencia si ese Diego si Urdiales confirmo días atrás en la asociación el Toro de Madrid que ya tenía las ganaderías para el próximo San Isidro, por lo cual por sus palabras se intuye que recula Simón Casas y el sistema hace que el francés guarde el Bombo para otra ocasión.