Los novilleros Máxime Solera y Tomás Rufo tenían una temporada 2020 muy ilusionante y esperanzadora por delante. Una temporada donde los dos novilleros iban a tomar una alternativa, en distintas ferias de primera categoría –Arles y Mont de Marsan respectivamente- que por el momento queda aplazada hasta nueva orden.
El coronavirus se ha cebado con Máxime Solera. Después de su inexplicable ruptura con el que fuera su apoderado desde hace 4 temporadas y que estuvo con él desde que era un novillero sin caballos, hasta conseguirle una alternativa soñada, se le suma la perdida de la novillada programada en marzo en Madrid y su gran alternativa en la emblemática plaza francesa de Arles. A todo esto se le une la suspensión de muchas de las ferias en las que iba a estar presente al principio de temporada. ¿Tomará la alternativa esta temporada? ¿Será en Cenicientos? ¿Quién sabe?.
Por su parte Tomas Rufo tendrá difícil sumar los 9 festejos que le hacen falta para alcanzar los 25 como novillero y tomar la alternativa en Mont de Marsan. Siempre y cuando la feria de La Madeleine se celebre. Con todo anulado hasta nueva orden, y con las especulaciones de que los festejos se pueden reanudar a partir de la mitad de Julio en adelante, parece difícil que Tomás Rufo tome la alternativa la temporada 2020, o tal vez sea Zaragoza y su feria del Pilar la elegida para tal ilustre día.
Lo que está muy claro es que uno de los sectores más afectados por la crisis sanitaria –Covid 19- será el escalafón de los novilleros con picadores. Un circuito que se verá duramente castigado esta temporada 2020, y que muchas ferias prescindirán de ellos, ante el elevado coste y tan poca recaudación.
Nuestro futuro es incierto, y se ha visto repentinamente parado por una crisis vírica que no solo nos hace temer por nuestra salud, sino que después traerá trágicas consecuencias en nuestra economía. En estos momentos inciertos, todos tenemos que estar unidos.
Por Juanje Herrero
