Al respecto de nuestro gobierno habló en el día de ayer el que fuera un gran estadista español Felipe González y, cuando se refería a un tal Pablo Iglesias dijo González que prefería a Franco antes que a Iglesias y, la afirmación no puede ser más categórica. La sentencia no puede ser más rotunda puesto que, la misma tiene una lectura bárbara. Que un socialista convicto y confeso como Felipe González haya dicho tal afirmación de un tipo que milita en la izquierda más radical, el asunto tiene mucha tela que cortar. Tiene razón González porque Franco, como el mundo sabe, nos concedió la más absoluta libertad para que nos ganásemos la vida con honradez y disfrutásemos de todo lo ganado con nuestro sudor. Y como en aquellos añorados años todo era orden en el más puro sentido de la palabra, por dicha razón Franco creó lo que se conocía ley de vagos y maleantes para que gentuzas como las que aludimos, todos estuvieran a la sombra.
Sinceramente, salvo los desaprensivos que cobran el sueldo del gobierno, dudo que nadie en su sano juicio pueda apoyar al descerebrado de turno, bolivariano por más señas y apestoso como nadie en el mundo. Es posible que, como hace unos días el Padre Ángel le lanzó el botafumerio a su favor, hasta es posible que el tipo se crea una buena persona que, quizás lo será para los suyos, pero para el pueblo español no deja de ser un maldito más a los que les pagamos los españoles con nuestros impuestos. Y encima se trabaja el papel de pobre. ¿Se puede tener la cara más dura hasta para engañar a los descerebrados que le votaron?
Dije millones de veces que Pablo Iglesias quiere acabar con la fiesta de los toros y, siempre se me ha tomado por loco pero, en el día de ayer ya se pronunció el pájaro mostrando su disconformidad al decir que la fiesta de los toros no puede ser cultura y que, como siempre dijo, al respecto hay que hacer un puto referéndum para ver si la gente quiere toros. Que yo sepa, el aberrante gobierno de España no aporta un solo euro a los toros, todo lo contrario que ocurre con el cine y demás titiriteros y maricones que, todos, sin distinción, reciben la subvenciones para poder seguir haciendo bodrios.
La que nos ha caído encima con este maldito gobierno que, no aciertan ni cuando se equivocan. La crisis por la pandemia ha venido a demostrar la ineptitud de estas gentecillas que, gandules e ineptos, han destruido España por completo. A las pruebas me remito. Eso sí, el odio que rezuman contra los empresarios es de puro manifiesto; claro que, la palma, al respecto se la lleva Pablo Iglesias que, por odiar, lo hace hasta con los empresarios más humildes; para dicho tipo, ser empresario ya es sinónimo de delito.
¿De dónde creerán estas gentuzas que se crea el bienestar de un país? ¡De las empresas! ¿Existe otro medio? Que alguien me lo aclare que yo no logro verlo. Bien es cierto que, esa calaña de gentes que viven de los impuestos que pagamos todos los españoles, los que trabajamos, claro, de no ser por nosotros esos descerebrados comerían mierda que, en realidad, es lo que en verdad merecen.
Pese a esta verdad tan cruda como he explicado al respecto de las empresas, la misma la siguen negando sin darse cuenta que, tras el confinamiento a que estamos siendo sometidos millones de personas se quedaran sin trabajo porque, los contratantes, es decir, las empresas, miles de ellas han quedado arruinadas. A partir de ahora, ¿cómo vivirán estas personas que han quedado sin nada, trabajadores y empresarios? Barrunto que iremos todos a Galapagar para que el tal Iglesias nos reciba en su rancho y que nos dé un plato de comida ¿verdad?
Eso sí, estos salvadores de la patria han sido capaces de dejarnos a todos en la más vil de las miserias, algo que no les ha afectado a ellos que viven como reyes sin dar un palo al agua. ¿Será que no leen los periódicos ni escuchan la radio donde a diario se nos cuenta la verdad de la vida? Seguro que no escuchan nada porque están tan ocupados en la maldad que, lo que al pueblo le pase les tiene sin cuidado. ¿Será que no saben que los comedores de Cáritas y demás entes sociales están atiborrados de españoles pidiendo un plato de comida?
Tampoco lo saben porque en la maldita televisión de ellos, es decir, la Sexta, en esa cadena no se habla de dichas dádivas de la sociedad española para con sus ciudadanos más pobres; y como en la TVE que pagamos todos ponen lo que les viene en gana, ni se enteran de la desgracia que está pasando en España. Eso sí, desprecian a Amancio Ortega que ha donado cien millones de euros mientras que, los aberrantes políticos no han dado ni las gracias, ni se han bajado el sueldo ni nada que tenga que ver con la solidaridad de las gentes.
Ante tal panorama, la industria del automóvil ha anunciado que muchas empresas se marchan de España porque están hasta los cojones de verse sometidos, tratados como si fueran delincuentes; era lo que faltaba para que España se quedara en la quiebra más absoluta. Y el tipo con la cara de cartón piedra sigue haciendo sus mítines semanales para contarnos mentiras que, algunos imbéciles se las siguen creyendo.
Iglesias, amparado por el tipo guapo, quieren arruinar a todas las empresas del país anunciando unos impuestos abusivos y criminales. Lo dicho, cuando ya no quede nada, ¿de qué comerán estos sinvergüenzas que solo tienen en la mente arruinarnos? Está clarísimo, estos tipos quieren un pueblo arruinado, muerto de hambre, preso y sin ninguna posibilidad de creatividad para, de tal modo, al más puro estilo de Chávez, cada semana darles una bolsita de comida para tener el voto asegurado a perpetuidad. ¿Y a este contubernio le siguen llamando democracia? Que baje Dios y me lo explique porque estos sujetos dudo que me lo puedan aclarar.
Con estos tipos en el poder nos ocurrirá lo que les pasó a los argentinos cuando entró Alfonsín al poder en que los argentinos dijeron: «Lo que no consiguió dictadura alguna en Argentina lo ha logrado este boludo, que todos seamos pobres de verdad y que lo único barato en Argentina sea el sueldo»
