Por Mario Gómez

Ángel Sánchez, entendió las embestidas de ambos oponentes firmando lo más granado de la tarde. Templado en su primero, ante un novillo de buen son, dejó momentos de mucho regusto, como un trincherazo para el recuerdo. Mala fortuna la suya, siendo corneado al entrar a matar, hecho que espoleó al público a pedir el apéndice que paseó. Con un vendaje, salió en el cuarto turno para dar cuenta de uno de los dos mejores novillos del envío de La Quinta. Novillo guapo, al que Sánchez recetó un acompasado saludo. Tras un torero inicio a derechas, fue por el izquierdo donde llegó lo mejor de su actuación y de la tarde. Muy acertado en distancias y toques, dibujó naturales de altos quilates, el mal uso de la espada le privó de algo más que una vuelta al ruedo.

Solo dejó pequeños detalles de su concepto Rafa Serna. Lejos de lo que en otro momento mostró, sorteó otro de los novillos importantes de la tarde, el 2º. Faena de momentos y detalles que no terminó de tomar vuelo más allá de una tanda de mano baja por el izquierdo. En el 5º, un novillo con la cara alta, no terminó tampoco de romper la faena. No tuvo transmisión el astado y no conectó con el tendido. El horrible manejo de la espada le provocó sendos silencios.

Pablo Atienza buscó templar las embestidas y hacer bien las cosas, aunque ante un andarín 3º se le notó la falta de bagaje. Muy digno el segoviano, sin duda lo mejor fue la certeza estoqueadora, que el publicó reconoció sacándolo a saludar al tercio. En el último de la tarde, se mostró algo más seguro. Tras el sainete del picador, toreó el novillero con fundamento. Animal de óptima condición que acusó el mal tercio de varas provocando que la faena no tuviese demasiada historia. Estocada contraria y algo desprendida y palmas en la despedida.