Miguel Tendero fue uno de los toreros que con más fuerza entró en el circuito después de tomar la alternativa. Proviene de la generación de Pinar, Luque… y compañía. A finales de la primera década del siglo tomaba una alternativa que celebró multitud de aficionados manchegos. Impactó en su primera temporada como torero. Llegó a indultar un toro de la ganadería de Valdefresno en Barcelona. Sin padrino, sin dinero y sin vitola se fue diluyendo año tras año.

Las Américas el único camino para sentirse torero. La tierra del cóndor le acogió como a uno más. Desde septiembre de 2017 que no torea en España, en su tierra. La plaza de Albacete, junto a un toro de La Quinta fue el último recuerdo que tenemos de este torero con gusto. Casi 3 años después vuelve a enfundarse el chispeante en España. Mientras tanto lo ha mantenido caliente en Perú.

Villamalea es su primera fecha de la temporada, el 9 de agosto a las 20h00 junto a Esaú Fernández y El Calita, toros de El Vellosino. La ilusión es lo último que se pierde. Una corrida televisada por el canal Castilla La Mancha media, que tal vez le haga coger un poco de ambiente para la temporada que viene. La afición pesa, las ganas afloran, el trabajo tiene recompensa “Me encuentro muy ilusionado, una temporada que estaba casi perdida, he podido conseguir una corrida de toros, de momento. Para mí es un triunfo entrar en el cartel. Que me puedan ver los aficionados por televisión es muy importante. Van a encontrar un torero renovado, los años de experiencia van sumando”.

José Montes es uno de los empresarios más activos de la temporada post covid, ha echado la “pata palante” y esta temporada puede realizar casi un 20% de los festejos totales en España “Yo creo que es un hombre luchador, un taurino que está intentando mirar por la fiesta. Tirando para delante en un momento muy delicado de la fiesta. Está intentando activar todo, que la tele pueda retransmitir festejos, que diferentes toreros salgan adelante. Al final esto es una cadena, y que tire para adelante es para estar agradecido, cuando muy poca gente está haciendo festejos por el tema del Covid”.

Una corrida, una nueva ilusión, un nuevo momento. Volver a empezar, con la esperanza en un presente que puede cambiar el futuro “Para mí es muy importante, llevo mucho tiempo sin torear en España. La última fue en Albacete, donde recibí una cornada de un toro de La Quinta. Tengo ganas de volver a sentirme torero, tengo muchísimas sensaciones. Estoy entrenando muchísimo, quiero llegar muy preparado. Estoy como un chiquillo con zapatos nuevos”.

Que dura es la vida del artista. Trabajando en lo que salga, en lo que haya, todo es digno para mantener una afición, que en ocasiones cuesta mucho dinero e ilusiones “Vivo de trabajar. No soy de familia adinerada. Trabajo en todo tipo de fábricas, en el campo, de camarero, de todo lo que salga para seguir viviendo. Hay que buscarse la vida para vivir, pagar las cosas y volver a reinvertir en el toreo. Hay que intentar dar la talla en la plaza para volver a ganar dinero como torero”.

El Vellosino vuelve a escena de la mano de José Montes, será la segunda corrida de la temporada. “La ganadería elegida es una de las ganaderías predilecta de las figuras. Complicada matar una ganadería así aunque sea en un pueblo. Sale bastante bueno. Ojalá que embista y pueda demostrar lo que llevo dentro. Quiero mostrar mi concepto, mi pureza y mi verdad”.

Mucha suerte a un torero que todavía no ha dicho su última palabra. Le queda muchas frases que decir, emociones que sentir, y sueños que lograr. Tal vez, la tauromaquia es dura e injusta, pero al final el momento llega.

Por Juanje Herrero