Después del boicot que ha sufrido la corrida de Villamalea llego el día de la corrida. Un ambiente bonito, con una buena entrada donde los aficionados pudimos disfrutar de una corrida que dejo detalles buenos.

Lo mejor de la tarde vino a cargo de Miguel Tendero. Que merito tiene este torero. 2 años después de torear su última corrida, se enfundó él chispeando para dejar una gran versión. Espero que le sirva de algo, y pueda recuperar por lo menos parte de su cartel cuando tomó la alternativa e indulto aquel toro de Valdefresno en Barcelona. Condiciones tiene.

La corrida de El Vellosino ha sido de trapío justo para una plaza de tercera, pero con las puntas íntegras. Algo que agradecer. Una corrida en la que hubo variedad de comportamientos, desde el codicioso y encastado, noble y con clase, y algún manso con genio. En líneas generales, la corrida era para cortar 8 orejas.

Miguel Tendero mostró su mejor versión en el cuarto de la tarde. Aunque dio una lección de compromiso, de actitud y ganas en su primero. Un toro que no acabo de romper, aunque tenía nobleza y clase. Dos orejas para una faena que no fue todo lo ajustado que debería, y que abuso en exceso de la tan recurrente “noria”. En su segundo la cosa cambio. Tanto la largura, como la pureza de los muletazos fueron de más calibre y gusto. Una tanda con la izquierda para enmarcar. Lástima que pinchara, si no estaríamos hablando de 4 orejas.

Calita no acaba de coger el aire al toro español. Dos toros boyantes y con posibilidades. Que acabaron por desperdiciarse. Una pena, porque los toros fueron fáciles. El torero mexicano lo intentó por todos lo medias, pero sin llegar acoplarse con ningún toro. Manejo mal los aceros.

Esaú Fernández también saco algo positivo de la corrida. Las dos orejas en el último de la tarde en compensación a la faena que hizo al tercero y pincho. El tercero fue un toro noble, con clase y recorrido, un caramelito. El torero andaluz le sacó algunos muletazos meritorios. Estuvo tranquilo y relajado. No estuvo tan a gusto con el que cerraba plaza, el peor toro de la corrida. Un toro manso de libro.

Por Roberto García

Fotografía  y agradecimiento a Arturo Pérez